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Draghi: "La inflación sigue baja desde hace mucho tiempo". Y no hay riesgo de deflación.

Según el presidente del BCE, la presión sobre los precios se mantendrá débil a corto y medio plazo y a largo plazo se mantendrá por debajo del objetivo del 2% - En cuanto a las posibles tendencias deflacionarias, Draghi señaló las diferencias entre Japón en los años XNUMX y La Europa de hoy por la calidad de los balances de bancos y empresas privadas

Draghi: "La inflación sigue baja desde hace mucho tiempo". Y no hay riesgo de deflación.

El BCE ha dejado los tipos de interés sin cambios y confirma una política acomodaticia con tipos bajos a largo plazo, sin cambios o por debajo de los niveles actuales. Y luego dijo que estaba lista para actuar con una artillería de herramientas a su disposición.

“El análisis y la información confirmaron nuestra decisión de política monetaria del mes pasado”, dijo Mario Draghi durante la conferencia de prensa habitual posterior a la decisión sobre las tasas de interés. El presidente de la Eurotower recordó cómo surgieron diferencias sobre el momento del recorte de tipos durante la última reunión, pero dijo que la decisión resultó estar justificada y que la orientación a futuro funcionó. Esto se ha visto, dijo Draghi, en diferentes indicadores (los rendimientos han disminuido, las emisiones han aumentado, por ejemplo). Eso sí, precisó, “cuanto mayor sea el proceso de desapalancamiento que tengan que acometer los bancos y los balances privados, más tardarán en verse todos los efectos de la política monetaria, y la revisión de la calidad de los activos ayudará a acortar los plazos”. .

En el frente macro, el BCE ha mejorado ligeramente sus previsiones de crecimiento en la Eurozona: ahora sus economistas esperan un 2013 de -0,4% para 2013, 1,1% para 2014 y 1,5% para 2015. En septiembre las estimaciones eran de -0,4% para 2013 y +1% para 2014.

Draghi confirmó que la política monetaria seguirá siendo acomodaticia y que el BCE está listo para actuar con una gama de herramientas técnicamente preparadas. “Tenemos una poderosa artillería de herramientas –aseguró Draghi, precisando que “no hemos identificado una en concreto por el momento y hemos hablado de la posibilidad de tasas de depósito negativas pero solo brevemente”. La reflexión del BCE también se refiere a la posibilidad de no esterilizar al menos en parte las compras de bonos del Estado realizadas por el banco central entre 2010 y 2102. Por otro lado, el presidente del BCE subrayó que es prematuro especular ahora sobre posibles acciones futuras. Aunque ha querido aclarar que en el caso de una nueva medida similar a Ltro “tendremos que asegurarnos de que se utilice para apoyar la economía” y no para comprar Btp. El camino recorrido por FLS, una LTER anclada a la financiación empresarial como se hace en Reino Unido, parece todavía cuesta arriba por la complejidad de su implementación en un contexto formado por varios estados nacionales. En cualquier caso, Draghi recordó que cuando se lanzó la Ltro, la situación era muy diferente y la 'Ltro logró evitar una severa y mayor contracción del crédito.

En cuanto al escenario macroeconómico, la presión sobre los precios se vislumbra débil en el mediano plazo mientras que en el mediano-largo plazo continúa manteniéndose por debajo de la meta del 2%. Para el BCE, por lo tanto, podríamos experimentar un período de baja inflación seguido de un movimiento ascendente gradual hacia el 2%. Draghi también ve muchas diferencias entre la situación de la Eurozona actual y la de Japón en la década de XNUMX: por ejemplo, la situación de los balances de los bancos y los particulares no es comparable, estamos a punto de iniciar una revisión de la calidad de los activos que contribuirá a mayor confianza en el sistema, los países del euro han avanzado en las reformas estructurales.

Sin embargo, los gobiernos no deben bajar la guardia. “En particular, las medidas de saneamiento deben favorecer el crecimiento y tener una perspectiva de medio-largo plazo minimizando los efectos distorsionadores de la fiscalidad. Al mismo tiempo, es necesario impulsar las reformas del mercado laboral y de productos para aumentar la competitividad, incrementar el potencial de crecimiento y generar oportunidades de empleo apoyando la adaptabilidad de nuestras economías”.

En el frente cambiario, Draghi precisó que el tipo de cambio del euro es una "fuente de interés común" ya que influye en la estabilidad de precios y el crecimiento, pero no un objetivo de política monetaria.

Por último, sobre los posibles impactos del tapering de la Fed, Draghi recordó cómo en junio el anuncio de la ralentización de los estímulos había tenido una repercusión limitada aunque más fuerte en los países emergentes y que esto podría haber generado una repreciación que podría reparar a la eurozona de las consecuencias de estrechándose

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