El último, en orden cronológico, es el tifón Haiyan, que ya ha causado miles de muertos. Filipinas, junto con Haití y Pakistán, se encuentran entre las tres naciones con el mayor número de víctimas por desastres naturales en 2012.
Según un estudio retomado por Les Echos y realizado por Germanwatch, un grupo de expertos dependiente en parte del gobierno alemán, este tipo de eventos ya habían matado a más de 1400 filipinos el año pasado, víctimas del tifón Bopha, y habían costado más de 1,2 millones de dólares para la economía del archipiélago, el 0,29% de su producto interior bruto.
Los cálculos de la catástrofe que acaba de ocurrir todavía están por hacer. Lo que se sabe es que los números son mucho más altos.
Al estado presidido por Benigno Aquino no le ha ido bien en los últimos 20 años. Germanwatch lo ubica entre los 10 países más afectados en el período 1993-2012. Para ser precisos, está en el séptimo lugar. Los tres primeros son, en orden, Honduras, Birmania y Haití.
El grupo de expertos también proporcionó algunas cifras globales: en las últimas dos décadas, las catástrofes climáticas han causado 530 muertes y daños por más de 2500 billones de dólares.
Para que conste, los 10 estados que han sufrido las mayores pérdidas son todos países en desarrollo. Empezando por Haití, la nación más pobre del llano, devastada el año pasado por el huracán Sandy, que también tocó las costas de Estados Unidos. Los Estados, en este ranking, ocupan el puesto 31. Una posición poco envidiable, pero que muestra cómo la economía de este país es más sólida y ha permitido absorber mejor una catástrofe que aún muestra sus síntomas.
La lista de vigilancia alemana, que tomó en consideración a 180 naciones, se basa en un "índice de riesgo climático global", que agrega los datos sobre la tasa de víctimas (número de muertes por cada 100 habitantes) y el costo del daño económico en comparación con el PIB.
En el ranking de Germanwatch, Italia, entre inundaciones y deslizamientos de tierra, ocupa el puesto 21. Le precede, en el decimosexto puesto, Portugal golpeado por los incendios. Rusia, cada vez más afectada por la sequía, ocupa el vigésimo sexto lugar.
