Londres lanza la flecha y adelanta a Hong Kong. En efecto, según un informe de la agencia inmobiliaria Savills, la capital inglesa sería la ciudad más cara del mundo para vivir y trabajar, impulsada, en este ranking especial, por el incremento del precio del alquiler de oficinas y por la Fortaleza de la libra frente al dólar.
En Londres, el costo anual de vida y trabajo de cada trabajador ascendería a unos 120.000 dólares. Le siguen Hong Kong (115.000), Nueva York (107.000) y París (105.00). En el ranking de Savills, que incluye las doce ciudades financieras más grandes del mundo, no hay ninguna ciudad italiana.
Pese al rebasamiento sufrido, Hong Kong sigue ostentando el récord de coste anual de alojamiento residencial y laboral, establecido en 2011 con la cifra de 128.000 dólares anuales por trabajador. En los últimos años, desde 2008 hasta hoy, las ciudades que han registrado las mayores tasas de crecimiento de costos han sido Río de Janeiro (+85%) y Sydney (+58%).
