“La recuperación de la producción y el empleo que observamos hoy es la señal aún débil de una inversión del ciclo económico, favorecida también por la revisión de los arreglos institucionales y contractuales llevada a cabo en los últimos tiempos”. Estas son las palabras pronunciadas ayer por el gobernador del Banco de Italia, Ignazio Visco, en su intervención en la conferencia por el 40 aniversario de Prometeia.
"Una vez que estas señales positivas se hayan consolidado, no deberíamos leer en este repunte cíclico, tras una larga y fuerte recesión, una indicación de que las dificultades de crecimiento de la economía italiana se han resuelto", continuó el gobernador, subrayando que las tendencias "ya están en marcha". y las que puedan derivarse de los avances tecnológicos requieren de una larga transición hacia una nueva organización de la economía y la sociedad”.
“Es difícil predecir el futuro -concluyó el Gobernador-, pero lo cierto es que necesitamos cambiar de perspectiva y entender que es prioritario, por un lado, fortalecer la capacidad de nuestra economía para involucrar la innovación y el progreso tecnológico, motores fundamentales de crecimiento y bienestar, y, por otra, para que todos puedan participar de ella y disfrutar de sus frutos".
