Nunca los encontrarás en las tiendas de telefonía, ni siquiera en las mejor surtidas. En todo caso, hay que ir a las calles de lujo, entre las tiendas de Rolex y Cartier. Cuestan mucho, pero tampoco son smartphones. Son teléfonos celulares Vertu, simples dispositivos móviles con teclado numérico y pantalla no táctil. Con más de diez mil euros te llevas a casa un teléfono que no hace más que hacer llamadas y enviar mensajes de texto.
Para los propietarios de iPhone, la elección puede parecer surrealista. Pero aquí el punto no es la tecnología, sino el lujo aplicado a la telefonía móvil.
Vertu es una pequeña empresa con sede no muy lejos de Londres. Una vez que fue una subsidiaria de Nokia, fue comprada el año pasado por el grupo sueco de capital privado EQT.
La compañía es tacaña con las cifras, pero según informa Les Echos, la recaudación ha crecido todos los años, excepto 2008, y alcanzó los 300 millones de euros el año pasado. Desde 2013, el director general es un italiano, Massimo Pogliani, de 47 años.
En sus 10 años de existencia, lo que lo convierte, explica el CEO Pogliani, en “el progenitor del mercado de la telefonía de lujo joven”, Vertu ha vendido más de 350 terminales. Cuál es la cantidad de iPhones vendidos en un día. Con la gran diferencia de que el precio medio de este móvil ronda los 5 euros y el precio máximo es difícil de calcular, porque las personalizaciones también incluyen el uso de diamantes.
Los productos de la compañía son sólo tres. El modelo base es el Signature, que supone el 20% de las ventas. Luego se introdujeron dos teléfonos inteligentes, el Constellation y el Ti, que comparten el resto del pastel.
Hechos a mano en Inglaterra, cada uno por un solo artesano, los teléfonos en cuestión son un derroche de lujo. La estructura es de cerámica y titanio, los rodamientos de rubí y los circuitos de oro y paladio. Y luego, por si fuera poco, acabados en piel plena flor, acero, oro, pedrería y fibra de carbono. Para rayar la pantalla, hecha de cristales de zafiro, se necesitaría un diamante. Que en todo caso, en el límite, sería parte del equipamiento del celular. Según las últimas pruebas, estos teléfonos que parecen viejos Nokia con incrustaciones de diamantes no se romperán incluso si los atropella un automóvil a alta velocidad.
El lujo también incluye una serie de servicios dignos de los mejores jeques. Vertu Concierge es una especie de lámpara de Aladino: con una llamada de teléfono obtienes servicios de conserjería, pero también reservas, ideas o consejos de estilo. Cualquiera que sea el significado de estas palabras. El servicio está en funcionamiento desde 2001 y parece que la primera solicitud fue una reserva para un vuelo Londres-Nueva York.
Luego está Vertu City Brief, una guía de viaje con más de 140 ciudades registradas. Algún malintencionado dirá que hay apps gratuitas mucho más ricas, pero el camino al lujo no pasa por los contenidos gratuitos. El pináculo lo alcanza Vertu Fortress, un servicio de respaldo. Nada nuevo, dirían algunos, la nube está al alcance de todos. Pero nadie garantiza proteger sus datos en servidores externos ubicados en un búnker subterráneo en Inglaterra.
