“Estabilizar la situación macroeconómica” es el objetivo del próximo paso del Banco Central de Ucrania. Mañana, en efecto, las principales tasas pasarán del 19,5% al 30% a la espera de que sirva para frenar la inflación galopante en el país. La operación, anunciada hoy por el Banco Central de Ucrania, forma parte de un plan más amplio de medidas financieras diseñado para bloquear la devaluación de la moneda y el aumento de la inflación.
El país necesita desesperadamente fondos para evitar la bancarrota. El movimiento desesperado del banco central de Ucrania se produce cuando el país espera la concesión de un préstamo de 17,5 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional.
Desde hace varios meses, el país se ve afectado por un conflicto armado derivado de fuerzas separatistas que buscan la anexión de Ucrania a la Rusia de Putin. Las tensiones geopolíticas llevaron la inflación del país a 28,5% anual en enero. Desde principios de 2014, la moneda ucraniana, la hryvnia, ha sufrido una devaluación catastrófica que ha provocado un aumento vertiginoso de los precios.
Inflación en Turquía
Los precios al consumidor también se dispararon en Türkiye. Mientras la Unión Europea lucha contra la deflación, Ucrania y Turquía intentan contrarrestar la inflación galopante. En enero de 2015 los precios al consumidor se ubicaron en 7,24% y al mes siguiente registraron un repunte de 7,55% respecto al mismo mes del año anterior.
El Banco Central de Turquía también intervino el mes pasado recortando los tipos de interés: el tipo repo a una semana pasó del 7,75 % al 7,5 %, el de un día al día del 11,25 % al 10,75 % y el de los préstamos del 7,5 % al 7,25 %.
