La maniobra aún no es ley, pero el Gobierno ya mira la "fase dos" de su mandato. Una de las intervenciones clave de 2012 será reforma laboral, anunció ayer el Ministro de Bienestar, Elsa Fornero, en una entrevista con el Corriere della Sera. Las palabras del catedrático, que instó a no considerar el artículo 18 del Estatuto de los Trabajadores como un "tótem" (aquel que impide los despidos sin justa causa), desataron de inmediato la polémica en el frente de los agentes sociales. Si la presidenta de Confindustria, Emma Marcegaglia, compartía la necesidad de una intervención en el mundo del trabajo, palabras de amarga polémica contra la ministra provinieron de los secretarios de los principales sindicatos confederales.
MARCEGAGLIA: EL ARTÍCULO 18 NO ES TABÚ, SE NECESITA UNA REFORMA
Según el líder de los industriales, “en una situación como esta, como dijo el ministro Fornero, no hay más tótems ni tabúes, ni cierres preconcebidos”. Confindustria se sentará a la mesa "para una negociación seria y pragmática" y "con voluntad de trabajar y colaborar" para lograr la reforma del mercado laboral. Es necesario “aumentar la flexibilidad de salida y estamos abiertos a algunas reducciones en la flexibilidad de entrada”.
“Las redes de seguridad social necesitan ser revisadas en parte”, reiteró Marcegaglia, porque “no puede haber un plan que atribuya el costo de los subsidios solo a las empresas. Como en todos los países puede haber una parte del coste para las empresas, pero parte de los costes deben ser prestaciones públicas por desempleo”.
CGIL, CAMUSSO: ARTÍCULO 18 REGLA DE CIVILIZACIÓN
“No es un tótem, sino una norma de civilización”. Así responde la líder de la CGIL, Susanna Camusso, al ministro Fornero. Aún desde las columnas del Corriere della Sera, Camusso lanzó un "desafío: ¿hagamos que el trabajo precario cueste más que el trabajo permanente y apostamos a que nadie dirá nunca que el problema es el artículo 18?".
En cuanto al contrato único, “sería un nuevo apartheid en perjuicio de los jóvenes: si hacemos un análisis de la realidad vemos que la precariedad existe sobre todo donde no se aplica el artículo 18, en las pequeñas empresas. Así que toda esta discusión se basa en una suposición falsa".
BONANNI: NO TOQUES EL ARTÍCULO 18, PAGANDO MÁS A LOS PRECARIOS
El secretario general de la CISL, Raffaele Bonanni, dijo estar "muy preocupado" porque "a 12 horas de la aprobación de la maniobra ya están removiendo un asunto que se sabe que genera problemas". El gobierno debe hacer que el trabajo flexible pague más. Pongamos a prueba el hecho de que quien es más flexible paga más y quien es menos flexible paga menos. La precariedad es el resultado de una flexibilidad mal pagada”.
En resumen, “Realmente no entiendo esta historia – continuó Bonanni hablando a los sindicatos en Piazza Montecitorio en contra de la maniobra – parece que quieren incitar a la protesta y esto no es lo que se suponía que debía hacer un gobierno interino. La señora Fornero que es maestra de escuela debe saber que sin un salario más alto no se pueden tener más aportes”.
ANGELETTI: MANIOBRA INJUSTA, ADELANTE CON LA MOVILIZACIÓN
El número uno de la Uil, Luigi Angeletti, aún se refiere a la maniobra: “No nos resignamos a dejar que las cosas se desarrollen según la lógica que le gustaría al actual gobierno. Esta es una maniobra que tiene de todo menos justicia”.