A pesar del fuerte cierre en Wall Street (el S&P 500 estuvo cerca de un máximo histórico), el índice regional MSCI Asia Pacific está en camino de registrar una pérdida de alrededor del 0,8% respecto a la semana pasada, mientras que las tensiones empeoran en Ucrania. La crisis está empezando a afectar a las materias primas, desde el níquel hasta el trigo: el aumento de los precios refleja los temores de cuellos de botella en el suministro (Ucrania es el sexto exportador mundial de trigo).
En China, sin embargo, los indicadores de posibles crisis financieras apuntan al regreso de condiciones favorables al riesgo, y el gobierno se ha asegurado de que cuenta con los medios para evitar peligrosas ralentizaciones del crecimiento. En Japón se han hecho públicos esta mañana los primeros datos relativos a los efectos en los precios de la subida de tres puntos del IVA (del 5 al 8%), en relación con el área metropolitana de Tokio. La inflación, y esta es una buena noticia para Japón, se aceleró del 1 % anualizado en marzo al 2,7 % en abril. El Nikkei pierde poco, alrededor del 0,2%.
En el campo de las divisas, la moneda china alcanzó su nivel más débil desde hace un año, en 6,256 frente al dólar. El euro y el yen (1,383 y 102,32) se mantienen estables en los niveles de ayer, mientras que el oro se mantiene por debajo de los 1300 y el petróleo WTI roza los 102 $/b.
