La carga fiscal sobre las empresas italianas es la más alta del mundo. PwC lo calcula en el informe "Pagando impuestos" divulgado hoy en Varsovia con el Banco Mundial y presentado en Roma al Ministerio de Economía.
De hecho, las empresas italianas están sujetas a una tasa impositiva total del 64,8% de los beneficios comerciales en 2014, una mejora frente al 76,9% de 2013. La media internacional es del 40,8%, casi un 25% menos.
El Informe “no refleja las reformas de los últimos dos años –subrayó el director del Departamento de Política Fiscal Fabricia Lapecorella presentes en la reunión, lo que sin duda tendrá un efecto”. Lapecorella también señaló que “en los últimos 10 años Italia ha mostrado una mejora constante del 76,9% al 64,8%”. En el porcentaje anterior pesa mucho el coste de la mano de obra, que ronda los 40 puntos.
