El sur de Italia viaja a una velocidad diferente al resto del país y "todavía no da señales de salir de las garras de la crisis, lastrada como está por déficits estructurales que no dan señales de mejorar". Estas son las conclusiones del último informe semestral "Check up Mezzogiorno", elaborado por Confindustria y Srm (Estudios e Investigaciones para el Mezzogiorno, centro vinculado al grupo Intesa Sanpaolo).
“Los desequilibrios -se lee en el documento- atañen a los más diversos sectores de la economía y la sociedad del Sur y se condensan en un valor del PIB per cápita un 41% inferior al del Centro y Norte, como ha sido el caso sin cambios apreciables durante varias décadas en esta parte. En comparación con los países de la Unión Europea de 27, la cifra del Mezzogiorno es más de un 31% inferior. Sin embargo, si se mira Región por Región, se observan brechas más amplias que las relacionadas únicamente con el nivel de riqueza”.
Las del Sur “están entre las regiones más alejadas de los objetivos fijados por Europa 2020, es decir, por la estrategia de crecimiento inclusivo y sostenible, basado en el conocimiento. Seis de las diez regiones con mayor tasa de desempleo europea se encuentran en el sur de Italia, al igual que cuatro de las diez regiones con mayor riesgo de pobreza se encuentran en el sur. Y, de nuevo, la cuota del gasto en investigación y desarrollo en el PIB registra un modesto 0,9% en el Sur, lejos de la media de la UE-27 (1,92%) y más aún del objetivo marcado por Europa 2020 (3%)” .
En cuanto a la industria del sur, el 95,8% está compuesta por empresas de menos de 10 empleados. Los análisis fueron realizados por Intesa Sanpaolo sobre una muestra de 6.500 estados financieros de empresas. Los resultados confirman la alta brecha en términos de eficiencia de la gestión industrial. Entre 2007 y 2009, la proporción de empresas cuyo equilibrio económico y financiero entró en crisis creció del 11,7% al 29,9%. Se estima que en 2012 casi la mitad de las empresas del sur no habrán recuperado del todo el terreno perdido a finales de la década pasada.
“De los análisis del Chequeo -observan Confindustria y SRM- se obtienen importantes indicaciones de política, comenzando por la urgencia de intervenir sobre los factores contextuales, traduciendo lo antes posible en medidas concretas los compromisos anunciados varias veces por el Gobierno desde el otoño pasado ( Plan del Sur) a la fecha (decreto de desarrollo y maniobra financiera). Un nivel de gasto de los fondos estructurales que supera ligeramente el 10% de los 43 millones destinados al Sur, así como el progresivo agotamiento de los recursos del Fas, recortados en unos 5 millones de euros el año pasado y, se estima, en un otros 4 millones en 2013-14, nos dicen que sin un compromiso renovado de las instituciones, la Administración y los agentes sociales será difícil llenar los huecos del Sur y emprender el camino del desarrollo de forma permanente”.
Al mismo tiempo “es necesario consolidar los brotes de vitalidad que, a pesar de tantas dificultades, están surgiendo en la estructura productiva del sur. No es casualidad que las actitudes cooperativas se vayan fortaleciendo paulatinamente, como lo demuestra el aumento de la proporción de empresas manufactureras que han recurrido al contrato en red para formalizar acuerdos de cooperación, que pasó del 4,8% en 2009 al 6,7% en 2010”.
