Sogin mejora sus cuentas en 2017 e incrementa su actividad de desmantelamiento. El Ebit alcanzó los 6 millones de euros (3,2 en 2016), el resultado neto fue de 5,1 millones (1,4 en 2016) y el valor de la producción, neto de gestión de combustible, fue de 186,9 millones frente a los 183 del año anterior. Un valor, explica el comunicado de la compañía que anuncia la aprobación del presupuesto de 2017, al que hay que sumar este año 221,9 millones para actividades de gestión y reprocesamiento de combustibles, que constituyen una partida presupuestaria transitoria y no estructural (11,5 en 2016).
En 2017 Sogin alcanzó un volumen de actividades de desmantelamiento de 63,2 millones de euros (53,8 en 2016). El segundo mejor resultado, subraya la empresa, desde que se constituyó la Compañía.
Por primera vez, el personal disminuyó a 1.210 recursos al 31 de diciembre de 2017, con una reducción general de 58 unidades. Por tanto, los gastos de personal del grupo pasan de 92,8 millones a 86,4 millones (-7%) netos de incentivos a la jubilación anticipada.
Las cuentas anuales consolidadas del Grupo, por su parte, cerraron con un beneficio neto de 7,8 millones de euros (4,2 en 2016). El resultado de explotación es de 10,3 millones (7,7 en 2016).
En 2017, el Grupo Sogin también triplicó sus pedidos a terceros, tanto en Italia como en el extranjero, pasando de 6,3 millones en 2016 a 20,8 millones en 2017 (+230%).
“En 2017, el Grupo Sogin registró, por primera vez en su historia, junto con el signo positivo de todos los indicadores económicos, una reducción significativa en los costos de personal y relacionados, declaró el Director Ejecutivo de Sogin, Luca Desiata. Al mismo tiempo, en términos económicos, la Compañía logró el segundo mejor desempeño histórico en actividades de desmantelamiento, mientras que los pedidos de terceros se triplicaron respecto al año anterior. Además, el acuerdo renegociado el año pasado con la British Nuclear Decommissioning Authority -añadió Luca Desiata- producirá una reducción significativa, por un lado, del volumen de residuos derivados del reprocesamiento del combustible que deberán regresar a Italia y, por otro, una reducción, también en este caso por primera vez, de 26 millones de euros en costes de vida útil para la gestión del ciclo del combustible”.
