Más que excusas. La metedura de pata, pero sería mejor decir la indigna genuflexión ante el turco Erdogan, del presidente del Consejo Europeo Charles Michel no puede pasar en caballería. Y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, humillada por la falta de silla en la ya famosa reunión de Ankara del 6 de abril, hizo muy bien en no atender las llamadas de Michel en busca de justificaciones imposibles.
Esta mañana, Michel trató de cubrirse con una serie de entrevistas con los principales periódicos europeos, incluido el Sole 24 Ore. Pero sus palabras no son convincentes y no pueden ser suficientes para reparar el grave daño que ha causado no solo a Von der Leyen sino a la Unión Europea con su asombrosa pasividad ante la prepotencia del "dictador" Erdogan. La pasividad se hizo aún más llamativa por la muy diferente reacción del primer ministro Mario Draghi ante la rudeza turca.
“Lamento mucho lo sucedido – trató de justificarse Michel – ya le he expresado mi pesar a la señora Von der Leyen y a todas las mujeres. Os aseguro que desde entonces no he dormido bien por las noches y que en mi cabeza he rebobinado la película del episodio decenas de veces. Asumo mi parte de responsabilidad. Tendremos que evitar tales situaciones en el futuro”. Pero para evitarlos, se necesita una fuerte respuesta de Europa y Michel debe abandonar la escena lo antes posible. Su pasividad frente a Erdogan y a expensas de Von der Leyen y Europa ha atestiguado plásticamente su insuficiencia. Y no es casualidad que un grupo creciente de eurodiputados, en su mayoría socialistas, está recogiendo firmas para pedir su renuncia. Así lo propone también el presidente del Movimiento Europeo, Piervirgilio Dastoli, asistente histórico de Altiero Spinelli, quien sugiere que el Parlamento Europeo concluya el debate sobre el crimen turco con una resolución de desaprobación política a las acciones de Michel, para poner fin a su mandato por "negligencia grave". Afortunadamente, el mandato de Michel expirará a finales de año, pero echarlo antes sería una bendición.
