El frente de los inmigrantes sigue muy candente y el interés por el tema sigue ampliándose incluso fuera de las fronteras europeas. el presidente de los estados unidos Barack Obamade hecho, reiteró la necesidad de la máxima "cooperación entre EEUU y toda la UE", durante un encuentro con el rey de España, pidiendo también una comparación "con el origen del flujo migratorio: la guerra de Siria".
Precisamente en este sentido, Estados Unidos ha hecho un llamamiento a Rusia para que se involucre de una forma "más constructiva", junto a la coalición internacional, en la lucha contra el Estado Islámico en Siria, mientras que la posibilidad de un encuentro sobre el tema entre Obama y Putin definitivamente despegan. El encuentro entre ambos, el primero desde noviembre del año pasado, podría celebrarse en la asamblea de la ONU a finales de septiembre.
Mientras tanto, la emergencia continúa. Debido a la llegada de miles de refugiados, de hecho, la gobierno húngaro declaró el estado de emergencia en dos condados del sur fronterizos con Serbia, otorgando así poderes especiales a la policía y permitiendo el uso del ejército para vigilar la frontera.
Una línea dura que no se limita, sin embargo, solo a estos aspectos, ni a la construcción de la barrera de alambre de púas en la frontera con Serbia. El gobierno de Budapest, de hecho, tras la fallida cumbre extraordinaria de ayer en Bruselas, lanzó una nueva ley de inmigración, que prevé hasta tres años de prisión para cualquier persona que intente ingresar ilegalmente al país. Además, el gobierno húngaro está evaluando la posibilidad de construir una valla también en la frontera con Rumanía.
El resultado más evidente de estos movimientos son los varios, más de 170, ya realizados en la frontera, y la emergencia que actualmente azota a Serbia, donde siguen llegando migrantes sin poder salir.
Mientras tanto, Angela Merkel,, que pidió un Consejo Europeo extraordinario sobre los refugiados la semana que viene, critica a Italia y Grecia: “Es urgente que hagan los hotspots de inmediato. De lo contrario, no puede haber una distribución equitativa de los migrantes".
