En julio, el crecimiento del sector de servicios de Italia se aceleró a su nivel más alto en 10 años. Así lo revela el índice PMI elaborado por IHS Markit sobre la confianza de los gerentes de compras en la categoría, que volvió a crecer por primera vez en los últimos tres meses, saltando a 56,3 puntos desde los 53,6 de junio (el umbral de 50 puntos es la que marca el límite entre la expansión y la contracción).
Un resultado similar, decididamente superior a las expectativas de los analistas (el consenso estaba en 54,1), no se veía desde mediados de 2006. El componente impulsor fue el relativo a los nuevos pedidos (buen augurio, por tanto, para los próximos meses, porque estamos hablando de facturación futura), que aumentó entre junio y julio de 55,6 a 57,5 puntos, récord en más de 11 años.
El martes, sin embargo, Markit había publicado el índice PMI relativo al sector manufacturero italiano, que mostraba una modesta ralentización del ritmo de crecimiento hasta los 55,1 puntos, una décima por debajo de junio y de las expectativas.
El indicador compuesto, que es una síntesis de manufactura y servicios, subió así a 56,2 puntos, desde los 54,5 del mes anterior.
En lo que respecta a la economía de la Eurozona, el PMI compuesto cayó a 55,7 puntos en julio, desde los 56,3 de junio. El resultado está justo por debajo de la estimación preliminar, que fue de 55,8 puntos.
