El sector más destacado del Made in Italy, la ropa, tiene un defecto: gestión de residuos. El día en que Italia también intervenga en la gestión de los residuos textiles habrá conseguido otro objetivo de esa economía circular cuya meta a veces parece inalcanzable.
Italia es el segundo exportador mundial después de China de la ropa y antes de la India y Alemania. Todo lo que se desecha durantee le el procesamiento de trajes, camisas, chaquetas, no se gestiona de acuerdo con las reglas de recuperación y reutilización. No es solo un problema italiano dado que el Plan de Acción Europeo sobre la economía circular ha identificado en el textil uno de los sectores industriales más críticos. Tiene un alto consumo de recursos ambientales pero también tiene un potencial de circularidad, regeneración y reutilización que no se aprovecha.
Crece la exportación de residuos textiles
Crece la exportación de cantidades de residuos textiles al extranjero. Ser en 2000 se trataron 550 mil toneladas, en 2019 la participación subió a 1,7 millones de toneladas de tela sin usar. El tema despierta el interés de economistas e investigadoresel. El Ministerio de Medio Ambiente ha puesto a consulta un proyecto de decreto, la Arena estudia una intervención de regolación.
Los economistas del Laboratorio REF Ricerche – donato bernardoi, Publicaciones Antonio Nieto-Rodríguez Pérgolas, Nicolás Valles - lo publicaron estudio “Textil: hacia una nueva responsabilidad”. En su interior se argumenta que “el reciclaje de textiles aún está por construirse en la perspectiva de plantas complejas y costosas, como las financiadas por el PNRR”.
La oportunidad del Plan se manifiesta pues en un sector con una facturación de 25 mil millones de euros, tiene 45 empresas y 390 empleados. El 20% de los residuos textiles acaban en los residuos indiferenciados, perjudicando la recogida diferenciada de los Municipios. Pero, ¿por qué los contribuyentes tienen que soportar un costo tan "impropio" al pagar el TARI? Sin embargo, desde enero de 2022 está en vigor la obligación de diferenciar estos restos. ¿Y por qué no se aplica esa regla que el que contamina paga? “Los Estados de la Unión Europea -responden a la REF- basan desde hace veinte años sus políticas de recogida diferenciada en la implicación financiera y organizativa de productores y distribuidores”.
El decreto y las responsabilidades
La estrategia europea de productos textiles sostenibles y circulares hace referencia a EPR (Responsabilidad Extendida del Productor) con responsabilidad para el productor. El proyecto de decreto italiano contiene indicaciones de este tipo, sin embargo “el reciclaje sigue siendo un segmento de la cadena de valor desde construir casi desde cero. La cadena de recuperación aún no ha sido diseñada".
El Ministerio de Medio Ambiente ha pensado en la implicación directa de distribuidores, gestores de servicios de recogida de residuos, ciudadanos, cooperativas, organizaciones sin ánimo de lucro y un Centro Coordinador de Reciclaje Textil (CORIT). El estudio encontró aspectos que deben mejorarse, deficiencias, para aprovechar todas las oportunidades ecológicas y comerciales de un sector italiano muy imitado.
El Ministro Gilberto Pichetto Fratín, al final, según el documento de la REF, habrá que especificar mejor cómo incorporar distribuidores y operadores a los consorcios de recogida; así como a quién pertenece la propiedad de los residuos. Otro punto importante es la contribución ambiental a pagar cuando los residuos se ponen en circulación: es "la principal palanca económica y financiera para el sostenimiento del nuevo sistema". Quien redactó el borrador de la medida ni siquiera tiene el problema de cobertura de costos de enajenación "que, por otra parte, siempre debe tenerse en cuenta". ¿Cómo trabajas en el gobierno? ¿Qué tan conocidos son los principios de la economía circular?
La moda italiana hacia el reciclaje
Si el objetivo es arreglar un sistema defectuoso, el gobierno -si cree en ello- debe pensar en los beneficios socioambientales. Se pueden crear nuevas cadenas de reciclaje, situando “las fibras textiles regeneradas entre los materiales protagonistas de la transición ecológica de nuestra fabricación”.
Los productores y distribuidores son bastante nuevos en el tema, pero ya están allí en Italia. cinco consorcios “impulsados por la industria y la distribución y que aspiran a convertirse en estratégicos en los nuevos equilibrios regulatorios. La planteada para los textiles –añadan Berardi, Pergolizzi y Valles– es una situación que se parece mucho a la de los residuos orgánicos, aunque con un alcance más limitado”. Los análisis de este tipo descubren incluso vacíos paradójicos en crear un sistema virtuoso que convierta los desechos en riqueza que no se puede generar.