Después de la renuncia de Giorgio Napolitano, “razonablemente podremos tener al nuevo Presidente de la República a fin de mes”. Esta es la predicción anunciada ayer por el primer ministro Matteo Renzi, que tiene en cuenta el calendario planteado como hipótesis por la Cámara. La primera convocatoria está en agenda para la tarde del 29 de enero, luego quizás dos votaciones el 30, para llegar a la esperada cuarta votación (cuando el quórum pasará de dos tercios a la mayoría absoluta) el sábado 31 de enero.
Mientras tanto, sin embargo, Silvio Berlusconi alza la voz: “La izquierda tiene al presidente del Senado, al presidente de la Cámara, al presidente del Consejo y al presidente de la Corte –dijo ayer el líder de Forza Italia–. Creo que es una cuestión lógica y justa pretender tener un presidente de la República que no sea la continuación de los últimos tres presidentes de izquierda de la República que han llevado a este país a una situación de no democracia”.
Palabras a las que Renzi respondió por la tarde, entrevistado por Daria Bignardi en La7: “Nadie puede vetarlas: no las acepto de Berlusconi, no las acepto de Salvini, ni las del Partido Demócrata. Para para. Pensar que el Presidente de la República puede ser imaginado como una figurilla de tal o cual partido… tranquilicémonos”. En definitiva, si Forza Italia se interpusiera en la elección del próximo Presidente de la República, "lo elegimos nosotros mismos", comentó el Premier.
