“Hoy en San Petersburgo firmaremos acuerdos por valor de más de mil millones de euros con empresas italianas”. Así lo ha anunciado en la mañana de este viernes el primer ministro, Matteo Renzi, precisando que los acuerdos se firmarán "en cumplimiento de los acuerdos con la comunidad internacional y el marco de sanciones".
El primer ministro, durante una visita a una obra de Astaldi en la ciudad rusa, definió el tema de las sanciones como “reduccionista: hay un problema mucho mayor que atañe a la relación entre la UE y Rusia, entre la comunidad internacional y Rusia. Estamos trabajando para construir puentes”.
Según Renzi, que participa hoy en el Foro de San Petersburgo, “se necesita diálogo, no clausura, que se necesitan espacios de encuentro, no de distancia. Y desde este punto de vista, me parece importante que haya esta cita en San Petersburgo y que el presidente de la Comisión, Juncker, haya venido aquí. Y me parece importante que reafirmemos las razones que nos unen, que son más que las que nos dividen. Por supuesto, las opiniones sobre Ucrania nos dividen: todos pensamos que los acuerdos de Minsk deben respetarse”.
Y por lo tanto el tema de las sanciones y contra-sanciones “está conectado con el respeto y la implementación de los acuerdos de Minsk – concluyó Renzi -. Pero al mismo tiempo, los italianos pensamos que se deben aprovechar todas las oportunidades de diálogo: lo hemos estado haciendo durante algún tiempo, lo hemos estado haciendo con Libia, lo estamos haciendo con Siria, para la lucha contra el terrorismo, para la afirmación de los principios culturales. Elegí iniciar la visita desde el Hermitage para recordar que este es el primer terreno que nos une: dos grandes superpotencias culturales”.
