La exclusión de la cláusula de los Tratados que establece la participación en una Unión cada vez más estrecha, el reconocimiento de un mercado único multidivisa, un papel más destacado de los parlamentos nacionales individuales y, sobre todo, la suspensión durante cuatro años del acceso a la asistencia social para los ciudadanos no ingleses que lleguen en el Reino Unido Estas eran las peticiones que había hecho David Cameron en Bruselas para evitar que Gran Bretaña saliera de la UE. El proyecto de acuerdo presentado esta mañana por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk parece acoger a casi todos ellos, alejando el espectro del Brexit.
El texto ahora deberá ser discutido con los otros países miembros antes de su aprobación, que podría tener lugar durante la cumbre de la UE prevista para mediados de febrero. Pero el obstáculo más importante a superar será el referéndum popular que con toda probabilidad se realizará el próximo mes de junio, cuyo resultado se hace cada día más incierto.
El borrador ha recibido numerosas críticas, en particular en relación con las concesiones que Bruselas pretende hacer sobre la libre circulación de personas. De acuerdo con las disposiciones del documento, la Comisión de la UE deberá presentar una disposición destinada a modificar la legislación comunitaria actual para permitir que un país bloquear la concesión de beneficios sociales a un ciudadano de un país de la Unión por un máximo de cuatro años, como solicitó Cameron durante las negociaciones. Según el texto publicado hoy, Londres estaría en "situación excepcional" para aplicar el freno de emergencia.
La propuesta de Tusk también establece que los parlamentos nacionales de al menos 16 de los 28 países tendrán la posibilidad de solicitar la revisión de una propuesta legislativa de la Comisión dentro de las 12 semanas posteriores a la presentación
En el ámbito monetario, los países excluidos de la unión monetaria tendrán la posibilidad de solicitar la revisión de un texto legislativo aplicable a la zona del euro, en caso de que resulte contrario a sus intereses.
La propuesta prevé dar más 'voz' a los estados que no han adoptado la moneda única, pero estos últimosno tendré la posibilidad de vetar el funcionamiento efectivo de la unión bancaria o sobre la futura integración de la zona del euro.
Las soluciones propuestas por Tusk fueron bien recibidas por el primer ministro británico, David Cameron: "El documento sobre la renegociación de la UE muestra un progreso real en las cuatro áreas en las que el Reino Unido ha propuesto cambios, pero aún queda trabajo por hacer", dijo Cameron. .
