Matteo Renzi abre la campaña por el SÍ al referéndum de octubre sobre la reforma constitucional del Senado y el Título V. Lo hace desde Bérgamo, donde visitó Brembo ("Sois un ejemplo para el país").
“Si el No ganara en el referéndum –dijo inmediatamente Renzi–, Italia se convertiría en el país de los desbarajustes”. Tras recordar que Enrico Berlinguer, el secretario del PCI, también era partidario de la unicameralidad, Renzi explicó, punto por punto, los beneficios de la reforma, que abarata los costes de la política, simplifica la toma de decisiones, suprime organismos inútiles como como las provincias o el Cnel.
Ante las protestas de una veintena de opositores, Renzi no ha perdido los estribos y ha dicho que la campaña por el SÍ se hará con una sonrisa y con mucha ilusión. Luego recordó que, si pierde, dejará la política.
