En 2019, el sector de la cultura empleó a casi 500.000 personas en Italia, lo que contribuyó con el 2,2 % al PIB del país. Más allá de su impacto directo, la cultura tiene una influencia significativa en otros sectores como el turismo, contribuyendo a la cohesión social, el desarrollo sostenible y la reducción de las desigualdades. Según el informe de Minsait “La tecnología al servicio del arte y la cultura”, que acaba de publicarse, la transformación digital es la única vía posible para dar respuesta a las necesidades de democratización de la información y el arte, a los nuevos perfiles de visitantes y a la actual situación de pandemia. Para ello, es fundamental implementar soluciones digitales que permitan compartir información entre todos los agentes de la cadena de valor para ofrecer a los usuarios experiencias más interesantes y mejorar la gestión del espacio. De hecho, Minsait está desarrollando proyectos que se están convirtiendo en importantes referentes en la transformación digital del arte y la cultura. En Italia, es el socio clave en la digitalización de los Museos Vaticanos para mejorar la protección de las obras y la seguridad de los visitantes. También participa en un proyecto europeo para la creación de un simulador histórico a gran escala para cartografiar 5.000 años de historia del continente. El enfoque integrado que propone la compañía facilita el análisis de la información de los visitantes, no solo para incrementar su número e ingresos por venta de entradas, por ejemplo, sino también para poner a su disposición servicios de transporte, alojamiento, ocio y compras desde el mismo momento de la planificación de la visita. . En el estudio, la compañía también apuesta por la inclusión de nuevos perfiles profesionales mucho más tecnológicos entre la plantilla de museos y empresas del sector para acelerar la transformación.
En esta perspectiva, Minsait considera fundamental la aportación de las herramientas CRM para gestionar la experiencia completa, las interacciones y los puntos de contacto entre usuarios y proveedores para mejorar la relación y obtener información de todas las dudas, reclamaciones, sugerencias o compras.
Pero, ¿cuáles son las soluciones tecnológicas clave para brindar servicios valiosos a los visitantes y promover el arte y la cultura?
- Aplicación móvil para aprender más sobre ciertas obras con más detalle, hacer zoom en obras específicas de una colección, jugar con contenido educativo e incluso visitar colecciones y obras que no están actualmente en exhibición.
- Redes sociales para establecer relaciones de comunicación directa y abierta con los visitantes, ofrecer mejores servicios a los ciudadanos y atraer a un público más joven en un momento en el que los dispositivos electrónicos parecen querer sustituir a los libros como elemento de entretenimiento.
- Chatbots para integrar funciones de atención al público de forma muy sencilla en relación con la resolución de cuestiones y dudas de carácter general o para dar respuesta a cuestiones muy concretas sobre aspectos de una exposición, un monumento, un edificio histórico o una representación cultural en cualquier momento y desde cualquier parte del mundo.
- Realidad virtual, aumentada y mixta, para conseguir que los visitantes disfruten de experiencias inmersivas y únicas que les lleven a sumergirse en el arte y la cultura como algo más que simples espectadores pasivos o que les permitan reconstruir y “vivir” espacios históricos.
- Beacons, que permiten al usuario realizar visitas mucho más personalizadas en función de sus necesidades e intereses, y a los gestores saber más sobre cómo interactúan los visitantes en los espacios o qué estancias son las más visitadas.
- Gamificación a través de dispositivos móviles que estimulen el proceso de descubrimiento cultural y aprendizaje del público más joven.
Además de las prestaciones y servicios pensados para los visitantes y usuarios de los espacios artísticos y culturales, el informe destaca las oportunidades que ofrecen las tecnologías para mejorar la gestión interna de los espacios y acelerar la toma de decisiones. Desde el punto de vista de la seguridad, destaca la incorporación de sistemas de alarma digitales y multimedia para guiar a los visitantes a las salidas de emergencia evitando aglomeraciones y asegurando la distancia social. La compañía también cree que en los próximos años se extenderá el uso de algoritmos e inteligencia artificial para activar protocolos de seguridad, así como la creación de centros de datos que integrarán la información de todos los dispositivos que interactúan con la seguridad. Finalmente, el estudio predice que la integración de soluciones de Big Data, Algorithms y Dashboard jugará un papel importante para facilitar la simulación de situaciones futuras para planificar las necesidades de recursos y organizar mejor los servicios.
