Poste Italiane multada con más de 20 millones por la Antimonopolio por un abuso de su posición dominante en el mercado de entrega de múltiples envíos de correo ordinario.
Son elementos que los clientes de grandes empresas (bancos, compañías de seguros, compañías telefónicas) envían a sus clientes (estados de cuenta, avisos de vencimiento, facturas).
La Antimonopolio, según una nota, constató una estrategia anticompetitiva de Poste Italiane que consistía en ofrecer a sus clientes finales condiciones económicas y técnicas que no pueden ser replicadas por competidores al menos igualmente eficientes, quienes necesariamente tienen que recurrir a los servicios de Poste. Italiane para la entrega en zonas rurales y menos pobladas del país. La estrategia se ha adoptado desde 2014, después de la liberalización de los servicios postales.
La respuesta de Poste está lista, preparándose para apelar el TAR. Según fuentes cercanas a la empresa, la posición de Poste Italiane es "definitivamente crítica" con la disposición de la Autoridad.
La compañía cree "que siempre ha implementado conductas absolutamente apegadas a las pautas regulatorias y la lógica del mercado, en un contexto altamente competitivo para proteger la calidad del servicio". Por estas razones, Poste Italiane "pretende apelar ante el Tribunal Administrativo Regional de Lazio, considerando que la multa impuesta en un proceso que comenzó en junio de 2016 y se prolongó durante casi dos años de investigación es inadecuada y contraria a la legislación pertinente, durante la cual la empresa ha brindado de manera exhaustiva y completa cada aporte y cada explicación solicitada por las oficinas de la Autoridad”.
