“El genovés Fiom-Cgil con un acto incomprensible decidió hoy ocupar el sitio de Ilva di Cornigliano. Invitamos a esa organización sindical a meditar detenidamente sobre las consecuencias de esta acción y sobre la participación concreta de los trabajadores genoveses en esta seria iniciativa". Esto es lo que leemos en una nota conjunta de los sindicatos nacionales de trabajadores metalúrgicos Fim Cisl y Uilm.
"Los delegados de Fim y Uilm, aproximadamente, nos informaron que de unos 570 presentes en el trabajo, solo 200 trabajadores asistieron a la asamblea y 350 permanecieron en el trabajo - continúa la nota - Todos los empleados restantes no presentes en el trabajo (250) son trabajadores en despidos Por lo tanto, una minoría de trabajadores decidió unilateralmente ocupar la fábrica anulando la decisión de la mayoría. Una verdadera obra maestra de la democracia directa tan elogiada por la Fiom. No más de 150 personas participaron en la marcha convocada por la empresa a pesar de haber obligado a la empresa contra los miembros de la Fim y la Uilm y no, que no participaron en su iniciativa. Además, se han apoderado, sin autorización, de una zona de Ilva en la que han colocado una carpa con la intención de bloquear a todos los trabajadores que no tengan intención de hacer huelga, a partir de mañana”.
Fim y Uilm se preguntan “si los partidarios del choque se dan cuenta de que con este acto no solo corren el riesgo de poner en peligro las negociaciones en curso, sino que también ofrecen el lado a la empresa que podría optar por tener el sitio disponible. Nos asombra que incluso la Fiom-Cgil nacional que, con un comunicado de prensa inicial ("Se destraba el enfrentamiento") había reconocido el inicio positivo de las negociaciones, apoye esta opción de "aislarse" de los trabajadores (dada la adhesión) y de las instituciones, una elección que podría resultar penalizadora para el sitio de Génova. El acuerdo programa no está en discusión pero Uilm y Fim (la genovesa Fiom lo acepta) defienden una parte fundamental de la siderurgia italiana. Cosa que queremos seguir haciendo (junto con la Fiom nacional) a partir de las negociaciones que abriremos con Mittal el 9 de noviembre cuando discutiremos el Plan Industrial”.
En ese encuentro, concluye la nota, “se abordarán temas relativos a estructuras productivas, inversiones, personal y protección del empleo. En lugar de reclamar mesas alternativas que no existen y aislarse, la Fiom debería participar donde se discuta el destino de los trabajadores del acero y, por lo tanto, también del sitio de Génova".