Italia figura a la cola de los países desarrollados en gasto público en educación, gasto público que se sitúa en el 4,7% del PIB frente a una media de la OCDE del 5,8%. Así lo revela el informe de la OCDE “Education at a Glance” 2012, que informa cómo, entre 2000 y 2009, el gasto del Estado respecto al gasto público total cayó al 9% (del 9,8%). marcando un crecimiento en términos reales del 4% (en comparación con un promedio de la OCDE del 33%).
El gasto anual por alumno, en los países de la OCDE, es de 9.249 dólares de media, mientras que en Italia es de 9.055 dólares. La contradicción italiana, entonces, es la de uno de los gastos más altos para la guardería y la escuela primaria, en comparación con uno decididamente por debajo del gasto universitario medio: 9.561 dólares frente a 13.719.
El gasto nacional en educación en Italia entre 2000 y 2009 creció un 4,9% anual, gracias sobre todo a la inversión privada. Según el informe de la OCDE, laOtra tarea que debe proponerse la escuela italiana es la relativa a la integración de los alumnos inmigrantes, cuyo número crece continua y exponencialmente. Sobre todo, una cosa llama la atención en esta discusión, a saber, la falta de uniformidad en la distribución de los estudiantes de origen extranjero, el 71,9%, de los cuales se concentran en una cuarta parte de las escuelas italianas.
