El gigante finlandés de la telefonía móvil Nokia ha anunciado nuevos recortes de empleo. Pretende eliminar 4.000 puestos de trabajo en tres plantas este año en Hungría, México y Finlandia, como parte de una reorganización de las actividades de producción en el segmento de teléfonos inteligentes que había anunciado en septiembre pasado, según un comunicado de prensa, y que tiene como objetivo aumentar la competitividad.
Una reorganización que de hecho implica la traslado de las operaciones de fabricación y ensamblaje de teléfonos inteligentes a Asia, "donde se encuentran la mayoría de los proveedores" de componentes, señala Nokia.
Las tres plantas afectadas por los recortes volverán a centrarse en la personalización de productos y la asistencia al consumidor, predominantemente en Europa y América. El grupo añade que proporcionará "programas de apoyo, incluida la asistencia financiera" a los trabajadores afectados por las tijeras "adaptados" a las circunstancias locales.
