"Ha llegado el momento de romper, de forma paulatina pero a un ritmo sostenido y constante, el muro de la deuda publica acumulado a lo largo de las décadas. Este es el llamamiento lanzado por el Presidente de la República, Giorgio Napolitano, durante la ceremonia de entrega de la insignia Cavaliere del Lavoro en el Quirinale.
Según el Jefe de Estado, “las dificultades están ahí para que todos las vean” y “Europa mira con preocupación estas dificultades”, a la espera de “toda integración necesaria de las decisiones ya adoptadas y opciones urgentes de reforma estructural y estímulo al crecimiento”.
En este momento “se requiere una asunción de responsabilidad fuerte, clara – continúa Napolitano – ampliamente compartida, añado, para que sea más creíble, más garantizada en su efectividad de implementación. Por lo tanto, no puedo silenciar mi angustia al señalar que las condiciones políticas para este intercambio más amplio aún no se han dado.".
A continuación, el Presidente renueva "el más sencillo de los llamamientos: que cada uno haga su parte", porque "debemos tener la preocupación de dar respuestas convincentes a nuestros socios europeos, a las instituciones europeas y juntos -una necesidad ahora candente- a gran parte de las clases populares, de la fuerza de trabajo, y sobre todo de los jóvenes".
El Jefe de Estado se refiere en particular a la "problema del desempleo juvenil y la frustración“, que “debe estar en el centro de nuestras preocupaciones: y hablo de preocupaciones por la cohesión social y también por el equilibrio democrático y la convivencia ciudadana”.
Por estos motivos, Napolitano concluye su intervención “pidiendo previsión a todas las fuerzas sociales y políticas. Debe evitarse el riesgo de errores en los cálculos electorales.
