El exjefe de Estado, Giorgio Napolitano, rechaza el acuerdo sobre la ley electoral y la hipótesis del voto anticipado. "Veremos los resultados de este gran entendimiento de 4 líderes de partidos que actúan solo calculando sus propias conveniencias", dijo Napolitano. "Es simplemente paradójico discutir si la celebración de elecciones anticipadas en otoño o principios del próximo año podría desencadenar más incertidumbre política en Italia".
Su comentario sobre la hipótesis del voto anticipado es muy duro. "Es simplemente paradójico discutir si podría desatar la incertidumbre política en torno a Italia, más aún yendo a elecciones anticipadas en otoño o principios del próximo año", dijo el expresidente de la República, y agregó: "En este cambio acrobático del francés al alemán al menos podría ahorrarnos el galope del Parlamento este fin de semana”.
“El primer elemento de incertidumbre que hay que sacar es este, aún en el momento presente –aumenta el expresidente–. El espectro de la inestabilidad gubernamental resurgió muy poco después de la toma de posesión y el buen comienzo del nuevo gobierno de Gentiloni: es a partir de febrero que los rumores y las presiones por elecciones anticipadas 'lo antes posible' comenzaron a perseguirse, y luego el riesgo de una la precipitación injustificada e irrazonable fue evitada por la consolidación del consenso, en Europa y en Italia, en torno al gobierno Gentiloni, y por la firme apelación del Presidente de la República al interés general y a la correcta práctica constitucional”.
“En todos los países democráticos europeos, la votación tiene lugar al final natural de las legislaturas: hacer lo contrario significa hacer la máxima contribución negativa a la consolidación de la credibilidad político-institucional del país. Y es simplemente anormal que en cambio el juego y el pacto extraconstitucional en la fecha de la votación se haya convertido casi en un corolario del acuerdo entre los partidos sobre la nueva ley electoral”, concluyó Napolitano.
