Solo un "malentendido". Así calificó el canciller austriaco, Christian Kern, la amenaza de Austria de utilizar el ejército para guarnecer el paso del Brennero si no se interrumpe el flujo de inmigrantes procedentes de Italia. La controvertida cuestión de los migrantes vuelve a preocupar a Europa, tanto que ayer, 4 de julio, Bruselas dio luz verde a una serie de medidas para hacer frente a la emergencia.
La amenaza de Austria, que ya había bloqueado la ola de inmigrantes durante el verano de 2015, requirió la intervención diplomática, tanto que la Farnesina citó al embajador de Austria en Roma.
La emergencia migratoria sigue siendo un tema candente y urgente especialmente en Italia, debido a los 12 desembarcos registrados la semana pasada, pero la corrección de rumbo por parte del gobierno austriaco parece echar agua al fuego.
"Los malentendidos como los que han surgido con Italia deben aclararse", dijo Kern en una conferencia de prensa conjunta con el ministro de Defensa de Austria, Doskozil, quien había sido el primero en temer la amenaza del ejército en el paso del Brennero.
El canciller Kern agregó que Austria se está preparando para introducir controles en el paso de Brenner en caso de un aumento en la llegada de inmigrantes, pero que por el momento no son necesarios.
"No estamos desplegando vehículos blindados en el Paso del Brennero y repito que la colaboración con Italia es realmente buena", dijo Kern, y agregó que no hay elementos para decir que Italia no tiene la situación bajo control.
