Después de meses de controversia, huelgas y estasis. la negociación sobre el contrato nacional de los trabajadores metalúrgicos parece haberse reabierto oficialmente. Durante la reunión celebrada hoy, 28 de septiembre, Federmeccanica y los sindicatos llegaron a un punto de encuentro sobre la nueva propuesta presentada por la Federación Sindical de la Industria Metalmecánica Italiana que acoge parcialmente las solicitudes de las distintas asociaciones sindicales relativas a aumentos salariales.
Durante los meses anteriores, este era el punto fundamental que había estancado las negociaciones: por un lado, Fiom-Cgil, Fim-Cisl y Uilm, que pedían recuperaciones de nómina para todos, por el otro Federmeccanica que había propuesto en cambio un salario mínimo de garantía que habría recompensado (según los sindicatos) solo al 5% de la audiencia de beneficiarios.
La propuesta presentada hoy por la Federación encabezada por Fabio Storchi prevé en lugar de garantizar a todos los trabajadores, en el balance final, la recuperación de la inflación real: 100% en 2017, 75% en 2018 y 50% en 2019. Al mismo tiempo, se reforzará el bienestar empresarial, recurriendo también a las pensiones complementarias. Federmeccanica apoyó la hipótesis de reducción de la cotización mínima a cargo del trabajador (1,2%), reforzando la pagada por las empresas (del 1,6% al 2%).
Satisfecho con el comentario del número uno de Federmeccanica, Fabio Storchi, al margen del encuentro: “Estamos en el último metro. Hemos presentado una propuesta de mejora y creemos que hay poco margen de negociación a partir de ahora”. “Nuestra propuesta -añadió Storchi- pretende cambiar el centro de la negociación en la empresa aumentando los salarios y el bienestar corporativo y contractual para permitir a las empresas reducir costos y aumentar los beneficios para los trabajadores”.
“Después de las movilizaciones de los trabajadores de Federmeccanica – dice el secretario general de la Fim Cisl, Marco Bentivogli – se vio obligado a formular una nueva propuesta que supere la del pasado 22 de diciembre sobre la que había quedado anclada y que, según Storchi, cumple con las demandas gremiales".
Según Bentivogli, el acuerdo podría ser cercano siempre que Federmeccanica cambie su actitud negociadora. “Hasta ahora la gremial lleva nueve meses estancada en una propuesta blindada -explica el sindicalista- a pesar de saber que nunca habría tenido ninguna posibilidad de convertirse en un contrato, solo para consolidar consensos en su seno”.
Sobre el tema de los salarios, el número uno de la Fim Cisl no tiene dudas: “La recuperación inflacionaria debe reconocerse en su totalidad y para todos con las bases de cálculo compartidas en los contratos anteriores y reconocer solo el 50% de la inflación en 2019 cuando en cambio se espera la mayor recuperación. Si la inflación finaliza después de 18 meses, los atrasos deben reconocerse con mecanismos de protección, de lo contrario, demasiados meses sin protección del poder adquisitivo quedan fuertemente descubiertos”.
“Además, - continuó Bentivogli - para nosotros en Fim, la negociación empresarial debe ser amplia y calificada, y solo puede realizarse con una dimensión territorial. En este punto, resucitar el elemento de nivelación de 485 € es un retroceso respecto a la disponibilidad del 22 de diciembre de 2015. El Contrato no será innovador si no amplía, distingue y matiza los dos niveles, ampliando el segundo. Es bueno pensar en beneficios flexibles libres de impuestos que aumenten el poder adquisitivo de los salarios. Queda en un segundo plano la necesidad de cambiar profundamente el marco profesional. Dejemos de hablar de Industria 4.0 si no estamos dispuestos a ir más allá del marco profesional del '73”.
La próxima reunión entre las partes se ha fijado para el 12 de octubre.