Maserati se despide de Módena. Después de 80 años, la histórica planta de la ciudad emiliana está a punto de dejar de producir: el anuncio oficial lo hizo Pietro De Biasi, jefe de relaciones laborales de FCA, durante una reunión con los sindicatos enfocada precisamente en el futuro de la marca de automóviles bajo la Ghirlandina.
"Aquí no es posible hacer grandes números: la casa del Tridente ya trazó su estrategia fuera de Módena", había dictaminado el director general de FCA, Sergio Marchionne, a mediados de marzo, al hablar en la inauguración del año académico de la Universidad de Módena. Las pistas no faltaron: Maserati registró una fuerte ralentización el año pasado, pasando de 36.448 coches vendidos en 2014 a 32.474 unidades. Los ingresos, alrededor de 2,4 millones, cayeron un 13%. Y la planta de Módena ha pasado de 19 coches producidos al día en 2014 a diez en la actualidad.
La producción debería parar en 2017, y de momento la compañía no ha indicado planes alternativos: sólo permanecerá en Módena el área de investigación y desarrollo, lo que costará unos 120 despidos (30% de la plantilla actual) para ser reubicados entre Ferrari y otros Sede de Maserati.
