A partir de 2019 puedes ir jubilado antes de los 67 años – umbral impuesto por la ley Fornero, asociado a al menos veinte años de cotizaciones – pero con penalti sobre el monto del cheque, para no trastornar las cuentas públicas. Esta es una de las medidas que está estudiando el Gobierno ante la nueva ley de presupuesto, que se lanzará a mediados de octubre.
En una cumbre en el Palacio Chigi -poco antes del Consejo de Ministros que aprobó el decreto sobre inmigración y seguridad-, el gobierno discutió la nota de actualización del Documento Económico y Financiero (Def), que debe publicarse hasta el jueves y contendrá los números sobre en los que se basará la maniobra de 2019: las previsiones (revisadas a la baja) sobre la evolución del PIB y, sobre todo, los objetivos sobre déficit y deuda.
Uno de los pilares, en los que insiste la Liga, es el capítulo de la seguridad social. Sigue siendo de actualidad el objetivo de la cuota 100, es decir, la posibilidad de jubilarse cuando la suma de la edad personal y de cotización sea al menos de 100 años. Originalmente se habló de fijar la edad mínima en 64 años, pero luego Matteo Salvini pidió bajar el listón a 62.
Si pasa la línea del viceprimer ministro de la Liga Norte, por lo tanto, será posible retirarse. a los 62 años con 38 años de cotización, a los 63 años con 37 años de cotización y a los 64 años con 36 años de cotización. La situación es diferente, sin embargo, para los de 65 años: como explicó a Gr3 Alberto Brambilla, experto en pensiones en la cuota de Lega, para los de 65 años, la cuota 100 debe transformarse en cuota 101, porque con menos de 36 años de cotización no se debe bajar. Esta es una de las medidas que se estudian para reducir los costes de la intervención.
La cuota 100, de hecho, permitiría jubilarse en torno a 433 trabajadores en 2019 y costaría 8,6 millones. Mucho, quizás demasiado, teniendo en cuenta que toda la maniobra debería valer 25-30 mil millones, pero ya están comprometidos más de 20: 2,5 por la falta de crecimiento (lo que provoca una caída de los ingresos fiscales y por lo tanto, salvo correcciones, un aumento en déficit), 4 para gastos adicionales de intereses de la deuda pública, 12,4 para desactivar la subida del IVA y 3,5 para gastos impostergables.
Por ello, el Gobierno evalúa otras correcciones que reduzcan aún más el coste de la cuota 100. Por ejemplo, para la jubilación anticipada, se prevé calcular todos los pagos después de 1995 usando el método contributivo: de esta manera el monto de la pensión también se reduciría en un 10-15%. Además, los contribuyentes deben poder contar un máximo de dos años de contribuciones nocionales.
La segunda hipótesis establece un recorte de pensión del 1-1,5% por cada año adelantado en comparación con los 67 años. Esta sanción, sin embargo, se eliminaría al cumplir los 67 años, cuando comenzaría la pensión completa.
Alternativamente, también se habla de un corte permanente, pero en este caso la sanción sería menor: 0,5-1% por cada año adelantado.