“Una invasión directa” de Rusia. Así definió el jefe de los servicios secretos ucranianos, Valentin Nalyvaichenko, la entrada de (hasta el momento) 130 camiones Kamaz del convoy humanitario ruso que cruzó esta mañana la frontera ruso-ucraniana, rumbo al este del país devastado por la guerra.
Los camiones partieron sin el visto bueno de la Cruz Roja sobre las garantías de seguridad y sin que Kiev diera su consentimiento. Sin embargo, el Kremlin dijo que el presidente ruso, Vladimir Putin, estaba al tanto de los hechos. Más temprano, el Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania afirmó que la responsabilidad de los convoyes humanitarios no recae en las autoridades ucranianas, aunque los camiones Kamaz, enviados desde Moscú, ya cruzaron la frontera ruso-ucraniana. “Hacemos hincapié en que la responsabilidad del movimiento seguro de las columnas rusas en el territorio, temporalmente no controlado por las fuerzas ucranianas, recae únicamente en la responsabilidad de la Federación Rusa”, dijo Andriy Lysenko, representante del centro de información del Consejo de Seguridad Nacional. en una reunión informativa en Kiev, de Ucrania. Ria Novosti lo informa.
