Con los precios del petróleo cayendo por el desplome de las bolsas y los temores de una posible recesión en Estados Unidos, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha revisado a la baja sus previsiones de demanda para el actual bienio. Y esto después de que la intransigencia mostrada por la propia OPEP en los últimos meses puede haber contribuido al deterioro del panorama económico que ahora está provocando la caída de todos los índices, incluido el del crudo.
Según el cártel árabe, la demanda mundial de petróleo crecerá a una media de 88,14 millones de barriles diarios a lo largo de 2011, 400 barriles menos de lo esperado. Para 2012, la OPEP recortó su pronóstico de crecimiento solo marginalmente a 89,44 millones de barriles, en comparación con los 89,50 esperados, aún por encima de este año.
En los últimos meses la OPEP se había negado a ceder al pedido de las economías avanzadas de aumentar la producción de petróleo para calmar la suba de los precios. Sin embargo, ahora corre el riesgo de pagar el precio ya que todos los índices del crudo se están corrigiendo a la baja: en Londres el Brent se acerca a los 100, cayendo a 102 dólares, mientras que en Nueva York el West Texas Intermediate ha alcanzado los 78,87 dólares, por debajo del umbral de los 80 dólares.
“Los nubarrones que oscurecen la economía ya están afectando la dirección que seguirá el mercado”, dijo la OPEP, “las posibilidades de un consecuente deterioro en la estabilidad del mercado requiere una mayor vigilancia y un control estricto de lo que sucederá en los próximos meses. ."
