ESTRATÉGIZACIÓN por Emanuele Sacerdote. El esencialismo fue una corriente filosófica transversal según la cual el conocimiento debe basarse en la búsqueda de la esencia y la sustancia: Platón, Aristóteles, Galileo y Popper se encuentran entre los principales pensadores que apoyan esta corriente. Hoy en día, por la situación que estamos viviendo, pero también por el exceso de consumismo pre-covid, podría surgir un segmento de mercado evidente en la que el esencialismo cobrará más fuerza y vigor en diferentes estratos sociales principalmente del viejo continente. Hay dos necesidades obvias: por un lado, la necesidad apremiante de una mayor autenticidad y, por otro, la necesidad de demostrar esta autenticidad: para citar a Erich Fromm, podría haber una nueva relación entre tener (en el sentido de posesión y propiedad) y el ser (en el sentido de identidad y realidad) en beneficio de este último. Este nuevo esencialismo se basa en una nueva demanda antropocéntrica de conciencia social fuertemente orientada hacia la responsabilidad y la complejidad. Hoy las certezas son cada vez más circunscritas y limitadas: tenemos la certeza de que la complejidad crece; estamos seguros que la competencia será más agresiva; confiamos en que el nivel de hipercomunicación crecerá; estamos seguros de que se está produciendo una nueva e importante revolución y transformación política, social e industrial. De ello se deduce que esta demanda del mercado podría tener un impacto significativo en las orientaciones del consumidor y el consumismo.El antropocentrismo se convierte en la forma de demostrar la centralidad del cliente. Los productos reciclables y los sistemas de reciclaje toman el relevo. Los materiales inteligentes y las soluciones auténticamente sostenibles son los ganadores y una buena parte de los consumidores están dispuestos a pagar un precio superior.La certificación de origen, procedencia y producción es un deber y una parte integral de la narrativa. Nuevas marcas con nuevas identidades responden mejor a este segmento. o Las marcas fusionan cada vez más sus identidades física y digital. La moda rápida y el diseño rápido se enriquecen con soluciones y productos de segunda mano reacondicionados.o Prevalece la propensión a comprar menos productos, pero de mayor calidad y durabilidad, en la búsqueda de la eficiencia funcional y espacial. El estilo supernormal y transestacional se convierte en una elección estética consciente y no en un compromiso por exceso de sobriedad.La atención al cliente impecable y honesta se ve recompensada con una mayor fidelidad. o Se privilegia el consumo cultural y vivencial (físico y virtual). Los dividendos emocionales pesan en las decisiones de compra. En parte ya está ocurriendo, pero aún de forma limitada y pronto algunos de estos comportamientos podrían volverse predominantes: en este sentido el esencialismo difiere mucho de la austeridad por su componente de conciencia de las opciones de consumo. Por el contrario, el esencialismo podría coexistir con una nueva fase de explosión del consumo hedonista y el lujo desenfrenado – venganza de compras – típico de los años ochenta y noventa. “Si quieres ser un verdadero buscador de la verdad, es necesario que al menos una vez en tu vida dudes, tanto como sea posible, de todas las cosas.” Descartes, Discursos sobre el método.
Todo lo mejor!
