¿Los niños no van a la escuela y se quedan en casa varios meses debido a las medidas restrictivas adoptadas en todo el planeta? De alguna manera hay que entretenerlos. Y bien podría hacerlo con juegos constructivos e inteligentes. Por lo tanto, no es casualidad que Lego, la legendaria marca danesa de ladrillos entrelazados, haya visto crecer sus cuentas en dos dígitos en la primera mitad de 2020, la caracterizada por la emergencia de Covid. Las ventas crecieron 14%; la facturación aumentó un 7% a DKK 15,7 mil millones en comparación con el mismo período de 2019; el beneficio operativo creció un 11 % hasta los 3,9 millones de coronas danesas gracias a la inversión en iniciativas clave de crecimiento a largo plazo; el flujo de caja libre es de alrededor de 4,1 millones de coronas danesas.
Pero lo más importante, explica una nota del grupo, es que la participación de mercado ha crecido en sus principales grupos de mercado, incluidos América, Europa Occidental, Asia Pacífico y China. Las ventas han aumentado a pesar del cierre de las plantas de producción ordenadas por las autoridades gubernamentales en México y China: Lego se ha organizado en consecuencia invirtiendo en envíos. “Los excelentes resultados – comentó el director ejecutivo del Grupo Lego, Niels B. Christiansen – fueron posibles gracias al trabajo de nuestro increíble equipo. Cuando el COVID-19 nos obligó a cerrar tiendas y oficinas, nuestros compañeros hicieron todo lo posible para trabajar de forma segura y llevar el juego a niños y familias de todo el mundo. Me gustaría agradecerles por su enorme aporte y por sus continuos y fantásticos esfuerzos".
