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Llamamiento Slow Food: la elección de alimentos puede combatir la crisis climática

Terra Madre Salone del Gusto se celebrará en Turín del 22 al 26 de septiembre. Se espera que más de 3000 delegados de 150 países se encarguen de la regeneración. Las consignas: reducir el consumo de carne, luchar contra el desperdicio de alimentos y no usar plástico de un solo uso. El testimonio de Edward Mukiibi

Llamamiento Slow Food: la elección de alimentos puede combatir la crisis climática

«Tenemos que empezar por la comida para contrarrestar la crisis climática, emergenza real en la base de migraciones, desastres ambientales y conflictos. Los ciudadanos podemos suplir la ausencia de la política y ser protagonistas de una gran acción colectiva». El llamamiento fue lanzado hoy por Carlo Petrini, fundador de Slow Food, presentando la próxima edición de a la prensa extranjera Terra Madre Salón del Gusto , que se celebrará en Turín del 22 al 26 de septiembre a la que se esperan más de 3000 delegados de 150 países y decenas de miles de visitantes en nombre de la regeneración

La pandemia y la guerra en Ucrania no deben hacernos olvidar el enorme daño de la falta de conversión ecológica

«Estoy firmemente convencido – añadió Petrini – de que la crisis climática se encuentra en un punto irreversible y que esta carrera difícilmente podrá detenerse a corto plazo, también porque el sistema político mundial no es suficientemente consciente de este estado de cosas. estamos emprendiendo uno nueva etapa historica, que durará varios años, la de transición ecológica. La conciencia que estaba creciendo en torno a estos temas fue bloqueada por dos eventos que nos distrajeron a todos: la pandemia y la guerra en Ucrania. Pero ya no podemos dejar de prestar atención a la conmoción que se está produciendo"

Para el fundador de Slow, la única oportunidad que tiene la humanidad para mitigar la crisis climática solo puede venir desde abajo, desde la sociedad civil, desde ciudadanos que tienen que iniciar una reconversión ecológica, como dice el Papa Francisco, un a partir de las elecciones diarias y en esto la alimentación tiene un papel central. La invitación de Dios Petrini es a participar en consumir menos carne, desperdiciar menos alimentos, eliminar el uso de plástico de un solo uso. Por ello, “este cambio de paradigma se vuelve fundamental, en este camino hacia una regeneración que parte del mundo de la producción de alimentos para generar un impacto significativo en el medio ambiente, la biodiversidad, la economía, la geopolítica, la justicia social y la igualdad de género. En una palabra, hacer política todos los días, con alegría, en nuestra vida cotidiana".

Eduardo Mukiibi: acción urgente, la crisis climática está generando conflictos y oleadas migratorias

Fuerte testimonio también provino de Edward Mukiibi, 36, agrónomo y estudiante de la Universidad de Ciencias Gastronómicas de Pollenzo, elegido a la cabeza del movimiento Chiocciola el pasado mes de julio, con motivo del último congreso internacional Slow Food.

“Yo vengo de uno familia de pequeños productores en Uganda y viví de primera mano lo que ha traído este sistema alimentario en mi país y en varias zonas del hemisferio sur. La crisis climática ya no es un mito y a estas alturas las bases científicas están más que confirmadas, sobre todo ya está claro para todos que debemos reaccionar porque vemos sus repercusiones en nuestro día a día. Lo hemos visto en Italia en los últimos meses, pero ahora también es evidente en el resto del mundo. Para ello debemos actuar de inmediato, también porque la crisis climática está generando conflictos y oleadas migratorias.

Es fundamental implementar sistemas regenerativos y agroecológicos a gran escala a través del trabajo de los jóvenes y las comunidades locales

Como ocurre, por ejemplo, en el este de Uganda, donde en época de calor las comunidades de pastores luchan por hacerse con los pastos, cada vez más escasos y secos. La producción agrícola y la alimentación son a la vez víctimas y causantes de estos fenómenos, pero depende del enfoque productivo que se utilice. Implementar sistemas regenerativos y agroecológicos a gran escala a través del trabajo comunitario local y juvenil nos puede permitir contrarrestar las consecuencias de la crisis climática, sobre todo para garantizar una vida sostenible y digna no solo para la generación actual, sino también para las futuras. Esto es solo un punto de partida, pero que quede claro que no podemos esperar más porque quizás mañana sea demasiado tarde», concluyó el presidente de Slow Food.

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