Por reducir la cuña fiscal en beneficio de los empleados sería mejor actuar sobre deducciones y tratamiento complementarioactiva, en lugar de limitarse a intervenir sobre los tipos del IRPF. Esta es la opinión expresada por Fabricio Balassone, jefe del Servicio de Estructura Económica de la Banco de Italia, durante una audiencia parlamentaria sobre la maniobra.
“Dado que las rentas del trabajo representan algo más de la mitad del total de las rentas declaradas –explica Balassone–, el objetivo de reducir la cuña fiscal que pesa sobre ellas se alcanzaría más eficazmente con la revisión de las deducciones y la complementariedad, que con la única reducción de tipos que también favorecería rentas distintas a las del trabajo.
Reducir la cuña fiscal es uno de los capítulos más polémicos de la maniobra 2022, ahora bajo consideración del Parlamento. El Gobierno ha destinado para este fin ocho mil millones de euros, dejando sin embargo a las Casas la tarea de decidir cómo utilizarlos. Los sindicatos piden que los recursos se inviertan íntegramente a favor de los trabajadores, rebajando el IRPF. Confindustria, por su parte, reclama más alivios en beneficio de las empresas: en particular, se habla de la posibilidad de cancelar Irap o de reducirlo y fusionarlo con Ires.
Al respecto, Balassone recordó que el irap también sirve para financiar el Servicio Nacional de Salud: si se cancelara, por lo tanto, habría que identificar "soluciones alternativas".
En cuanto al capitulo pensiones, "gracias a las reformas que han hecho más estricto el vínculo entre el monto de la cotización, la vida residual esperada al momento de la jubilación y el monto del subsidio - dijo Balassone - es posible introducir elementos de flexibilidad de salida en el sistema de pensiones sin poner en peligro la financiación sustentabilidad Sin embargo, la necesidad de contener el déficit público limita la posibilidad de destinar recursos sustanciales. Los contenidos marginales inmediatamente disponibles pueden ser utilizados para facilitar la salida del trabajo de personas que realizan trabajos duros o se encuentran en condiciones precarias de salud (Abeja social). Cuando la presión sobre las finanzas públicas haya disminuido, será posible ampliar los márgenes de flexibilidad a la salida. Es del aumento del empleo y de la productividad que depende la cantidad de recursos que se pueden destinar a apoyar a los ancianos sin imponer una carga excesiva a quienes trabajan”.