Con el mismo calendario, la estimación del PIB italiano para 2015 vuelve al 0,8% en lugar de caer al 0,7% como se conoció en los últimos días. Así lo aclara Istat que recuerda que en 2015 hay tres días hábiles y eso altera las estimaciones trimestrales y las proyecciones de crecimiento para todo el año. Tres días hábiles equivalen a un crecimiento del PIB en términos porcentuales del 0,1% y las cuentas suman.
Eso no quiere decir que, a pesar de haber salido de tres años de recesión, el crecimiento del 0,8% que parece que será en 2015 pueda satisfacer al país o incluso al gobierno.
“El crecimiento puede estar desacelerándose debido a los acontecimientos de París y la crisis en los países emergentes – tuiteó el primer ministro Matteo Renzi – pero Italia tiene todo para volver a ser una locomotora. La velocidad de crecimiento dependerá ahora del consumo interno y de la inversión”. Es decir, está en nuestro nunca, a condición de que se mantenga la estabilidad política y sigamos por el camino de las reformas.