Seis días libres adicionales, con respecto a lo establecido en la ley y el convenio colectivo, utilizable desde el final de la emergencia por Coronavirus hasta el 30 de noviembre de 2020, y parcialmente cobrable (3 días). Este es el premio que Intesa Sanpaolo quiere reconocer a todos sus trabajadores que en estas semanas tan complicadas trabajan en sucursales para garantizar los servicios al público o que realizan actividades que no permiten el uso del smart working. “Reconocemos el gran sentido de responsabilidad mostrado en esta etapa extraordinariamente compleja por parte de las personas del banco”, dice una nota. Cuando no se utilicen (durante un máximo de 3 días), estas vacaciones serán convertibles en efectivo, con un beneficio máximo global de aproximadamente 25 millones de euros.
“En Intesa Sanpaolo nunca hemos subestimado la emergencia – dijo el director ejecutivo carlo messina -. La máxima prioridad es la seguridad de toda nuestra gente. Por ello, hemos puesto en marcha todas las medidas posibles para trabajar desde casa de forma inmediata y a gran escala. Al mismo tiempo estamos asegurando la atención al cliente con la máxima flexibilidad, garantizando todos los servicios a distancia, para que nuestros clientes puedan ver satisfechas sus necesidades desde su casa”.
“Un agradecimiento especial a las personas que trabajan en la red territorial, así como a toda nuestra gente por cómo, aún en la emergencia, estamos asegurando la proximidad del banco a hogares y empresas. Una vez más la fuerza de la gente de Intesa Sanpaolo se confirma como una excelencia en el panorama del país”, concluyó Messina.
