¿Qué sucede cuando la inteligencia artificial se encuentra con el arte? ¿Es necesario fijar un punto en el espacio que delimite los límites entre lo analógico y lo digital? El debate sobre la evolución de la ciencia entendida como recurso o amenaza para el hombre sigue abierto. Por eso, el Museo MAXXI de Roma también ha decidido acompañar este sector del arte con una exposición y una serie de eventos.
Partimos de una pregunta que nace precisamente de cómo se ha ido estructurando el arte a lo largo de los siglos: primero fueron las pinturas murales, luego los carboncillos, las acuarelas, las témperas y los óleos. Luego estaban Warhol, Pollock, Dalí y la experimentación en el arte ha sabido seguir la evolución de la sociedad y los descubrimientos científicos. Hoy hay robots, máquinas, computadoras y la investigación artística se ha dejado penetrar por la investigación tecnológica. ¿Será posible seguir hablando del arte como siempre se ha entendido o se está creando una forma de expresión totalmente nueva ahora que se filtra por lo digital?
La exibición - Low Form: Imaginarios y Visiones en la Era de la Inteligencia Artificial, Abierto hasta el 24 de febrero de 2019, es un viaje inmersivo, multimedia y multisensorial que inspiró a 16 artistas internacionales que presentan un presente y un futuro cuya representación es hija del inconsciente tecnológico y una imaginación dilatada, entre sueños generados por computadora, algoritmos creativos y avatares. que cuestionan el sentido de la existencia.
Los artistas involucrados son: Zach Blas y Jemima Wyman, Carola Bonfili, Ian Cheng, Cécile B. Evans, Pakui Hardware, Jamian Juliano-Villani, Nathaniel Mellors y Erkka Nissinen, Trevor Paglen, Agnieszka Polska, Jon Rafman, Lorenzo Senni, Avery K Singer, Cheyney Thompson, Luca Trevisani, Anna Uddenberg, Emilio Vavarella.
Al margen de la exposición, se ha publicado un estudio sobre el nuevo surrealismo del siglo XXI que explica el trabajo de los artistas implicados que expresan una realidad generada y transformada por la tecnología. La de Low Form no es sólo una exposición que pretende ser un espacio expositivo en el que confrontar las intuiciones de los artistas, sino un laboratorio de estudio, comparación y reflexión en torno al tema más amplio de la relación del hombre con la tecnología y los posibles escenarios que pueden surgir en un futuro cercano o lejano, una posibilidad de dejarse invadir por la duda de que la carrera frenética del individuo hacia el delirio de la omnipotencia debe encontrar un freno o simplemente aprender a gestionar el progreso sin demonizarlo.
La exposición irá acompañada de una serie de actos, como el del miércoles 14 de noviembre titulado La conciencia del arte. La mente importa que fue el segundo encuentro promovido por el museo y por la SPI - Sociedad Psicoanalítica Italiana, que partiendo de los temas del programa expositivo, presentó un momento de confrontación entre el psicoanálisis y el arte en torno a las grandes emergencias de la sociedad contemporánea. El primer encuentro se remonta al pasado 4 de octubre con el título Del trauma al perdón, mientras que la final del ciclo se realizará el 14 de mayo y llevará por título Crisis de identidad y búsqueda de un centro.
“Tenemos que empezar a pensar en un nuevo rol del Antimonopolio para el siglo XXI que se ocupe de la centralización del poder en el mundo digital”, dijo el académico Luciano Floridi durante el evento del jueves 15 de noviembre. Transformación Digital Humana. Dibujando un proyecto humano para el siglo XXI.
Otra cita que pretende reflexionar sobre la relación entre el hombre y la máquina en paralelo a la exposición Low Form y en el contexto de proyecto artapés –programa de proyecciones en colaboración con In between Art Film– consiste en una selección de vídeos de los artistas contemporáneos más interesantes que analizan el estado del arte en la era de la información y el progreso digital, indagando en las implicaciones socioculturales de nuestro presente. Los videos de la reseña comisariada por Eleonora Farina, realizados en su mayoría de forma digital y mediante el uso de imágenes generadas por computadora (CGI), cruzan referencias culturales diferentes y transversales, en una contaminación entre disciplinas que restituye la variedad y la hibridez de la cultura globalizada.
El próximo noviembre 18 partiendo del análisis del edificio que alberga el MAXXI y diseñado por el arquitecto anglo-iraquí Zaha Hadid será posible visitar la exposición de forma gratuita y dejarse impregnar por la discusión sobre temas y cuestiones relacionados con nuestra relación con la tecnología y los increíbles escenarios abiertos por su evolución.
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