Las empresas italianas mantienen el ritmo, a pesar de que la crisis pone a prueba el espíritu emprendedor. En 2013 el balance entre cierre de actividades y nuevas actividades fue sustancialmente positivo respecto a 2012, si bien se trata del crecimiento más modesto desde 2004 hasta la fecha. En el último año se contabilizan 12 negocios más (+0,2%) respecto a los cierres, para un total de 384.483 negocios, unos 600 más que en 2012. Sin embargo, se incrementa el número de negocios que cierran sus puertas, desde 364.972 en 2012 a 371.802 en 2013.
Estos son los datos recogidos y procesados por las Cámaras de Comercio italianas, en el habitual informe Movimprese publicado hoy por Unioncamere, que habla de estabilidad en el tiempo: en los últimos nueve años, las altas siempre han sido superiores a las bajas y también en 2013 ( el año más difícil) cada día nacieron 1.053 empresas, frente a 1.018 que cerraron; sin embargo, desde 2007 hasta hoy, el flujo de nuevas altas ha disminuido un 11,8%.
Sin embargo, como observó el presidente de Unioncamere, Ferruccio Dardanello, “los negocios que continúan surgiendo son el resultado de un autoemprendimiento que debe ser visto con buenos ojos y apoyado. Tenemos que alimentar el coraje de quienes hacen negocios y devolver la confianza a las familias y buscadores de empleo y para ello es fundamental fortalecer las redes que construyen esa confianza, comenzando por las instituciones. Es un compromiso que las Cámaras de Comercio están llevando a cabo junto con los representantes empresariales, para mejorar la calidad de los servicios y su propia eficiencia».
Los sectores que registraron el signo + fueron sobre todo el comercio (+15.260 empresas), las actividades de alojamiento y restauración (+11.618) y los servicios de apoyo a las empresas (+7.723 empresas, que incluyen alquiler y viaje). Las mayores reducciones se producen en la construcción (-12.878 empresas), las actividades manufactureras (-5.929) y el transporte y almacenamiento (-1.156). El dato más preocupante es el relativo al mundo artesano: con un saldo negativo de -27.893 empresas, en 2013 el sector artesano perdió de hecho casi dos puntos porcentuales (-1,94%) de su base productiva, la contracción más significativa con diferencia desde el inicio de las encuestas estadísticas de Movimprese.
A nivel nacional, el cese de actividades afectó principalmente al Nordeste. En todas las demás áreas, a pesar de la presencia de un saldo positivo, se registró un menor crecimiento en comparación con el año anterior, con el centro de Italia confirmándose como el área más resistente del sistema empresarial (+0,74%, más de tres veces la media nacional). Más contenidos, pero por encima de la media, los valores del Sur (+0,31%) y del Noroeste (+0,23%).
La matriculación de empresas artesanales, en cambio, disminuyó de norte a sur.
