Nuevos problemas para Ilva, ahora acorralada hasta por los proveedores. De hecho, Eni envió una carta a la planta de Taranto anunciando la interrupción del suministro de gas a partir de fin de mes debido a la falta de pago. Aunque gran parte del gas que entra en la industria siderúrgica proviene de la reutilización, la pérdida de la cuota externa, que se utiliza para calentar altos hornos y acerías, pondría en grave peligro la actividad productiva.
Otros problemas, para Ilva, son los de las empresas contratistas y asociadas, que piden liquidar una parte de los créditos de las obras ejecutadas con los 125 millones de la segunda y última cuota del crédito puente concedido en los últimos días por la bancos a todo Ilva. Una situación cada vez más grave, según las palabras del presidente de Confindustria Taranto Vincenzo Cesareo: “Si no nos pagan, corremos el riesgo de desplazar al personal, así como de no pagar salarios y treceavos. Espero que no haya que ir tan lejos y que se encuentre una salida in extremis. Hoy hay un hecho: la crisis de Ilva nos ha desbordado”.
Mientras tanto, los sindicatos metalúrgicos han declarado el estado de agitación de los trabajadores de las plantas de Taranto y Génova-Cornigliano, que piden garantías en los salarios pero sobre todo en el futuro. Es posible un día de movilización general que involucre a todas las plantas del grupo.
