ArcelorMittal y Marcegaglia han anunciado que AM Investco Italia ha llegado a un acuerdo relativo al contrato de arrendamiento con obligación de compra de los complejos empresariales de Ilva. La documentación complementaria se completará el 30 de junio, mientras que Intesa SanPaolo se unirá formalmente al consorcio antes del cierre de la transacción.
El acuerdo prevé un precio de compra de 1,8 millones de euros, con pagos de arrendamiento anuales de 180 millones de euros a pagar trimestralmente. Inicialmente, AM Investco utilizará los activos de Ilva en alquiler, siendo los alquileres cuantificables como un anticipo del precio de compra. El inicio del arrendamiento está previsto para finales de 2017 y está sujeto a la autorización de las autoridades competentes.
Se espera que una contribución de Ilva aumente el EBITDA de ArcelorMittal en el primer año y aumente el flujo de caja libre de la compañía a partir del tercer año. El plan del consorcio también establece inversiones industriales de 1,3 millones de euros y medioambientales de 1,1 millones en siete años. Estos últimos incluyen 288 millones de euros para trabajos de recuperación, financiados con lo que el gobierno italiano embargó al propietario anterior, el Grupo Riva. La intención de adoptar en el futuro tecnologías innovadoras con bajas emisiones de carbono, incluidas las de captura y reciclaje de CO2, y el compromiso de investigar la posibilidad de utilizar el prerreducido cuando se den las condiciones de sostenibilidad económica acordes con el Plan de Empresa.
Lakshmi N. Mittal, Presidente y Consejero Delegado de ArcelorMittal comenta: “Hoy representa un importante paso adelante en el proceso de adquisición de Ilva. Tenemos muchas ganas de ponernos manos a la obra y de momento nos centraremos en cerrar el trato lo antes posible. Conocemos en profundidad lo que hay que hacer para mejorar el rendimiento de la empresa y, sobre todo, la relación con los grupos de interés y el territorio. Nuestra visión para Ilva es convertirla en un punto de referencia para la producción integrada moderna de acero. Alcanzaremos este resultado mediante la implementación de nuestros planes industriales y ambientales, que apoyaremos con inversiones sustanciales. Disponemos del capital, las tecnologías, las relaciones comerciales y la capacidad de gestión para asegurar una transformación positiva. También será fundamental involucrar a los grupos de interés y mantener un diálogo transparente encaminado a restablecer la relación de confianza entre Ilva y sus empleados y el territorio local. Somos plenamente conscientes de la confianza depositada en nosotros como nuevos propietarios de Ilva y pondremos gran atención en posicionar a Ilva como una empresa responsable, capaz y digna: factores clave para asegurar su futuro éxito y sostenibilidad”.
Aditya Mittal, El Consejero Delegado de ArcelorMittal Europa y Director Financiero del Grupo afirma: “Ilva es una adquisición muy estratégica para ArcelorMittal. Nos garantiza una importante presencia productiva en un país en el que no teníamos ninguna capacidad siderúrgica primaria, complementaria a nuestras actividades europeas. Estoy convencido de que esto presenta una oportunidad única para nosotros y estoy encantado de haber ganado la licitación con nuestra oferta. Tenemos mucho trabajo por hacer una vez que la transacción se complete formalmente y tengamos el control operativo de Ilva, pero creo que podemos mejorar su desempeño rápidamente y esperamos una contribución positiva al EBITDA desde el primer año. No hay ninguna razón por la que el rendimiento de Ilva a largo plazo no pueda alinearse con el de nuestras mejores plantas en Europa”.
antonio marcegaglia, Presidente y CEO de Marcegaglia dice: “Estamos orgullosos de haber podido contribuir al relanzamiento de un activo tan fundamental para nuestro país y ansiosos por trabajar con los sindicatos y todas las demás partes interesadas. Estoy seguro de que nuestro consorcio tiene todas las cualidades necesarias para restaurar Ilva, brindando una contribución positiva a la economía italiana, así como a los territorios en los que la empresa está presente".
La eficacia del contrato está sujeta a la concurrencia de determinadas condiciones suspensivas, incluidas las obligaciones de información y consulta. La venta de los bienes y el pago del precio de compra se realizarán en la fecha final de la conclusión del período de arrendamiento de dos años y estarán condicionados a la revocación del embargo de algunos bienes por el Tribunal de Taranto. El cierre de la transacción también está sujeto a la aprobación de las autoridades supervisoras europeas competentes.