Milán pasa a manos de Elliott, el fondo estadounidense conocido en Italia por la pelea con Vivendi por el control de Telecom.
El último y desesperado intento de vender el club rossoneri se ha quedado en nada y Yonghong Li tendrá que hacerse a un lado. En las últimas 48 horas, tras el impago de la devolución de 32 millones de euros adeudada por el dueño del AC Milan a Elliott, había esperanzas de un acuerdo in extremis con el magnate ruso, Dmitri Rybolovlev, dueño del Mónaco, quien expresó interés marzo pasado.
El viernes, Li no reembolsó la ampliación de capital de 32 millones de euros proporcionada por el fondo estadounidense después de que Li no ingresara en las arcas del club el 22 de junio.
En este punto, el hedge fund de Paul Singer tendrá el control de las operaciones y podrá iniciar el procedimiento para hacer efectiva la prenda sobre las acciones de Rossoneri Sport Investment en Luxemburgo y por tanto sobre el club. Sin embargo, antes de hacerlo, Elliott probablemente querrá tomarse unos días para evaluar el panorama completo de la situación. De hecho, no olvidemos que la oferta de Rocco Commisso sigue en el plato. El pasado 8 de julio, el empresario ítalo-estadounidense reafirmó su voluntad de comprar el club milanés: “Tengo que tener cuidado con lo que digo, porque la mayor parte de esta negociación es privada. Quiero cerrar este trato, pero aún no hemos llegado. Estuvimos muy cerca de firmar un precontrato. ¿Soy confidente? No controlo el resultado".
Sin embargo, la transición a Elliott podría complicar aún más el trato: “No sabemos qué camino tomará el Sr. Li con el Sr. Singer (propietario del fondo de Elliott), es difícil predecir cómo terminará esta historia.
ACTUALIZACIÓN
Chen Huashan y Henry Isabelle dejan la junta directiva de Rossoneri Champion Investment, una de las sociedades de cartera de Yonghong Li en Luxemburgo. En su lugar ingresan Aldo Savi, el húngaro Viktor Schuh y Gloria Centineo Cavarretta Mazzoleni. Este es el primer movimiento de Elliott para hacer cumplir la promesa.
