"La consolidación de las finanzas públicas no es suficiente: también se necesitan reformas estructurales para fortalecer el crecimiento. Y esto también se aplica a Italia”. Así lo afirmó el vicepresidente de la Comisión Europea, Olli Rehn,, Jefe de Asuntos Económicos e invitado hoy en Montecitorio.
Rehn también se dirigió al Parlamento italiano sobre la situación del euro: “la recuperación económica se ha estancado“, una ralentización del crecimiento que refleja tanto la “turbulencia del mercado de la deuda pública como una ralentización económica mundial”.
Para 2011, la Comisión espera un Crecimiento económico del PIB de la zona del euro de solo +0,5% y se espera que la situación empeore en 2012. Rehn lanza la advertencia: "El contagio de la crisis de la deuda pública se extiende desde los países periféricos hacia los países del centro".
Pero anima a Italia: “Italia se enfrenta a retos formidables”, ahora necesita dar "señales fuertes a los mercados y ciudadanos" sobre la búsqueda de objetivos que sean "alcanzables". Se necesitan medidas ambiciosas para relanzar el crecimiento y garantizar la equidad social, en los últimos meses -agregó- se ha avanzado”. Rehn ha pedido una implementación total de las medidas anunciadas en los últimos meses.
