Las feroces protestas que aquejan a Hong Kong desde hace meses la convierten en otra víctima ilustre. Esta vez le toca a Louis Vuitton, la marca de lujo más grande del mundo por ventas, que anuncia que se dispone a cerrar una de sus tiendas en la ciudad-estado asiática, donde las protestas han afectado la demanda y las rentas han alcanzado precios demasiado elevados, dado el desorden y la situación de altísima tensión que se vive desde hace ya más de seis meses .
El periódico South China Morning Post informó la noticia. La casa de moda, líder mundial en la producción de bolsos, tiene la intención de cerrando su tienda en el centro comercial Times Square, escribe el periódico citando fuentes familiarizadas con el asunto. La empresa por su parte afirma en su web que tiene ocho tiendas en Hong Kong.
El periódico también informa que la decisión de cerrar se produce luego de que la empresa no lograra llegar a un acuerdo con el propietario para reducir los costos de alquiler en el centro comercial. Wharf Holdings, el dueño del centro comercialy Vuitton no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios. Por ahora, la empresa matriz de Vuitton, LVMH, el conglomerado con sede en París que posee otras marcas de moda como Christian Dior y el coñac Hennessy, no se ha pronunciado.
Las marcas de lujo en Hong Kong están sintiendo el pellizco desde que las manifestaciones antigubernamentales se intensificaron en junio pasado y esperan que los disturbios disminuyan en uno de los principales destinos de compras del mundo. Hasta ahora, las marcas de lujo solo habían cerrado temporalmente sus tiendas en Hong Kong cuando estallaron las protestas.