Harley-Davidson ha firmado un acuerdo de culpabilidad en Estados Unidos por un total de 15 millones de dólares para desestimar las acusaciones de que el fabricante de motocicletas ha violado las leyes que imponen un límite a las emisiones contaminantes. Según el Departamento de Justicia y la Agencia de Protección Ambiental (la EPA, la misma que detonó el dieselgate que sepultó a la empresa alemana Volkswagen en septiembre pasado), el grupo ha producido y vendido unos 340.000 dispositivos ilegales llamados 'super sintonizadores' que, cuando instalado, permitió que las motocicletas emitieran más emisiones que las certificadas por la EPA.
Además, según el gobierno de EE. UU., Harley-Davidson ha vendido más de 12.000 motocicletas sin la certificación EPA que garantiza que un vehículo cumple con los estándares requeridos.
La compañía no admitió haber hecho trampa, pero acordó pagar una multa de $12 millones y gastar $3 millones en proyectos de aire limpio. "Dada la importancia de Harley-Davidson para el mercado, este es un paso muy significativo hacia nuestro objetivo de detener la venta de 'dispositivos de desactivación' ilegales que causan contaminación dañina en nuestras carreteras y en nuestras comunidades", dijo John C Cruden, asistente del secretario de justicia y jefe de la división de medio ambiente.