El próximo año, Google ofrecerá cuentas corrientes en colaboración con el grupo bancario Citigroup y un pequeño prestamista en la Universidad de Stanford, que tendrá la gestión operativa de todos los activos financieros. Por eso no hablamos de uno banco de google en sí mismo sino un servicio financiero para atraer aún más clientes.
La mayoría de los esfuerzos anteriores de Google se habían centrado en tarjetas de crédito y plataformas de pago. En 2001 se puso en marcha Cartera de Google, un servicio que puede simplificar los pagos utilizando un teléfono inteligente en lugar de tarjetas de crédito. Mientras que en 2018 nació Google Pay, con el objetivo de que el servicio de pago funcione tanto en tiendas como en plataformas digitales.
Como parte de un proyecto de código cache, la compañía se convertirá en el último gigante de Silicon Valley en probar suerte en el espacio bancario, según el Wall Street Journal.
La nueva cuenta actual estará vinculada a la aplicación Google Pay preexistente, lo que sugiere que será más fácil y eficaz de usar.
Intentos previos de Apple e Facebook han encontrado varios obstáculos con los consumidores que se han vuelto cada vez más escépticos acerca de proporcionar información personal a las grandes empresas de tecnología.
Ven annunciato da César Sengupta, el ejecutivo de Google que sigue de cerca toda la operación bancaria, "estamos explorando cómo podemos trabajar con bancos y sindicatos en los Estados Unidos para ofrecer cuentas corrientes inteligentes a través de Google Pay, ayudando así a los clientes a beneficiarse de información útil y herramientas presupuestarias, manteniendo su dinero en un cuenta asegurada. Si podemos ayudar a más personas a hacer más cosas digitalmente, será bueno para Internet y para nosotros”. Este podría ser un camino más largo, pero ciertamente más sostenible.
Además, Google asegura que no quiere venderme datos financieros de sus clientes Otros funcionarios han expresado su preocupación por la supervisión financiera. Esto se debe a que las cuentas bancarias incluyen información extremadamente sensible por su propia naturaleza y el gran gigante tendrá que poder demostrar su "buena fe". Y es precisamente por eso que Google quiere adoptar una enfoque más suave y más colaborativo con el sistema financiero. Sin embargo, lograr que los usuarios permitan el acceso a sus datos puede ser más difícil de lo que piensa. Sobre todo en este momento, cuando Google se encuentra en el ojo de la tormenta por parte de usuarios y autoridades precisamente en lo que se refiere a protección de la privacidad del usuario.
En resumen, si las afirmaciones se hicieran realidad, Google podría convertirse seriamente en la primera gran empresa de tecnología en ofrecer servicios financieros integrales, desde cuentas corrientes hasta préstamos bancarios.
