Il Tribunal General de la Unión Europea rechaza el recurso de Google y reitera la multa de 2,42 millones euros percibidos por el grupo en 2017 por prácticas comerciales desleales. El gigante estadounidense había sido multado por la Comisión Europea por haber favorecido ilegalmente su servicio de comercio electrónico, Google Shopping, perjudicando a la competencia.
Por lo tanto, el tribunal ha rechazó la apelación, presentado tanto por Google como por la empresa matriz Alphabet, señalando "la naturaleza anticompetitiva de la práctica". En esencia, Google ha garantizado un posicionamiento privilegiado en el buscador para su servicio interno, relegando a sus competidores a posiciones secundarias.
Bruselas había abierto la investigación en 2010 tras las denuncias de Twenga y Tripadvisor, dos empresas que ofrecen servicios que compiten con los de Google Shopping.
A pesar de confirmar el fallo, los jueces dictaminaron que Google no perjudicó el mercado de búsqueda general y, por lo tanto, abandonaron la propuesta de la UE de "declaración de infracción ampliada", que habría resultado en una multa aún mayor.
