Google se lanza a sectores cada vez más nuevos: desde los coches autónomos hasta los ordenadores portátiles (empezando por las famosas gafas)… y ahora (pero no es la primera vez) también en el negocio de los cables submarinos.
El tráfico de Internet sigue aumentando y Google lo sabe mejor que nadie, tanto que se preocupa por construir la infraestructura necesaria para transportar los tropecientos bits que viajan por las autopistas electrónicas del planeta.
Ahora, junto con otras 5 empresas de telecomunicaciones asiáticas, se prepara para tender (el contratista será NEC) 9.000 kilómetros del cable de fibra óptica más capaz jamás instalado: conectará Japón (y luego otros países asiáticos) y la costa del Pacífico de EE.UU. La inversión prevista por Mountain View es de 300 millones de dólares.
El proyecto, acertadamente llamado Faster, comenzará pronto y la instalación se completará en la primera mitad de 2016. Las otras empresas son el operador móvil japonés KDDI, China Mobile International, China Telecom Global, Malaysia Global Transit y Singapore SingTel.
