Martin kaymer cierra los primeros 36 hoyos en Pinehurst No. 2 con el extraordinario resultado de 130 golpes, diez bajo par. Es casi un récord para eso. US Open, el segundo Major de la temporada que siempre se juega en diferentes campos, cada vez preparados de tal manera que dificultan la vida de los jugadores. Este año, en Carolina del Norte, el campo no es imposible, pero los escollos son muchos y los resultados así lo atestiguan. Todos menos uno, el del dusseldorf de 29 años que ya ha ganado The Players esta temporada.
La ventaja de Kaymer sobre sus perseguidores en estos momentos es de seis golpes, detrás de él el primero de la lista es un coetáneo: Brendon Todd, de Pittsburgh (Pensilvania) número 55 del mundo. Kevin Na y Brandt Snedeker siguen en -3. Entre los europeos, en quinta posición, encontramos al número dos del mundo Henrik Stenson (-2), en décimo Rory McIlroy (-1), luego Francesco Molinari, decimocuarto, con una puntuación de 140 tiros. Misma puntuación que el número uno del mundo, Adam Scott.
Kaymer domina una clasificación corta desde arriba, que se juega en el espacio de unos pocos golpes y que aún podría cambiar mucho de aquí al final.
Es difícil decir si el alemán resistirá a este nivel dos días más, seguro que lo intentará y es bueno recordar que en 2010 ganó un Major, el Pga Championship, en 2011 estaba en lo más alto del ranking desde hace unos meses y hace dos años estuvo de estrellas Ryder. Sería un gran éxito para él, incluso si, lamentablemente, acabaría con el espectáculo.
En las dos primeras vueltas Martín mostró un juego perfecto, fallando solo tres fairways y sacando 26 de 36 greenes, completando un score con 11 birdies y solo un bogey y quiere volver a atacar en las dos últimas vueltas.
“Si crees que estás defendiendo el resultado -dice- es que estás tirando para atrás y esto no funciona jugando al golf”. En definitiva, el alemán está muy decidido y hasta ahora todo le ha resultado fácil.
Para muchos otros, sin embargo, Pinehurst resultó ser un obstáculo imposible y algunos favoritos de la víspera pasarán el fin de semana en casa, desde Bubba Watson hasta Luke Donald, aunque el corte se ha fijado alto en +4. Ni siquiera Andrea Pavan lo logró, en su debut en un Major.
Molinari, en cambio, logró otra gran hazaña y hoy sale desde la pole position, a las 14,08 hora local (20,08 en Italia), con Erik Compton, solo siete salidas por delante de Kaymer y Todd. Tras ellos Adam Scott y Jordan Spieth, en un mano a mano a buen seguro a seguir. Luego Matt Kuchar y Henrik Stenson, quien parece haber redescubierto algo del brillo del año pasado. Keegan Bardley y Brendon De Jonge; Dustin Johnson y Brooks Koepka; Brandt Snedeker y Kevin Na; finalmente a las 15,25 (21,25) el líder con Todd.
Phil Mcikelson, el eterno segundo de esta carrera, consiguió pasar el corte por un pelo, se encuentra a 13 cuerpos de Kaymer en la 33ª posición, con 143 golpes por detrás. Pero no renuncia a su optimismo: "Esta es una carrera -dice- donde todo puede pasar". Y les creemos.
